Cientos de personas se han manifestado este domingo en Monterrey, capital de Nuevo León (norte), para exigir la dimisión del alcalde de esta ciudad, Fernando Larrazabal, y del gobernador estatal, Rodrigo Medina, por el ataque perpetrado el pasado 26 de agosto contra el Casino Royale, en el que murieron 52 personas.
Los manifestantes se han concentrado en La Explanada de los Héroes para exigir la dimisión de ambos funcionarios por la inseguridad y la corrupción que ha destapado el ataque contra el Casino Royale de Monterrey, en el que estarían implicados varios policías.
No obstante, la manifestación, convocada por las organizaciones Monterrey Dice Hasta Aquí, No Más Violencia y Evolución Mexicana, entre otras, ha sido interrumpida por un grupo de partidarios del gobernador, supuestos miembros del Partido Revolucionario Institucional (PRI).
Los simpatizantes de Medina se han encarado a los organizadores para exigir respeto, sin conseguir con ello que cesase la protesta. Por ello, han decidido subirse al templete de la plaza, desde donde han pedido la dimisión del presidente mexicano, Felipe Calderón, perteneciente al Partido Acción Nacional (PAN).
Después, los partidarios de Medina se han trasladado al Palacio de Gobierno, donde han entonado cánticos de apoyo al gobernador, según informa el diario ‘El Universal’.
Esta es la segunda protesta ciudadana celebrada en menos de una semana para denunciar el clima de inseguridad existente en Nuevo León. El pasado domingo, una protesta frente al Palacio de Gobierno terminó con incidentes similares.