Calderón solicita a EEUU más colaboración en la lucha contra el narcotráfico

El presidente de México, Felipe Calderón, ha solicitado a Estados Unidos mayor colaboración en la lucha contra el narcotráfico, instándole a adoptar medidas para reducir su demanda interna de drogas, ya que es el país que más estupefacientes consume de todo el mundo.

«Necesitamos aumentar nuestra cooperación en temas críticos como la seguridad. Nos hace falta tener respuestas mucho más efectivas a nivel regional para enfrentarnos a esta amenaza», ha dicho Calderón desde Nueva York, donde se encuentra para asistir a la 66ª sesión de la Asamblea General de Naciones Unidas.

El mandatario basa su solicitud en el hecho de que Estados Unidos es el mayor consumidor de droga del mundo, por lo que toda la droga que se produce en el hemisferio sur del continente americano se dirige a este mercado a través de la frontera con México, disparando así los índices de violencia en este país.

«Estamos viviendo en el mismo edificio y todos quieren venderle drogas a nuestro vecino a través de nuestras puertas y nuestras ventanas», ha ejemplificado el mexicano, en declaraciones recogidas por el diario ‘El Universal’.

Así, ha instado a Estados Unidos a adoptar medidas encaminadas a reducir el consumo de droga en su territorio. «Pero si no consiguen limitarlo, entonces los tomadores de decisiones tendrán que buscar más soluciones, incluyendo alternativas de mercado para reducir las utilidades astronómicas de las organizaciones de delincuentes», ha propuesto.

Estas palabras de Calderón han sido interpretadas como una referencia velada a la legalización de las drogas en Estados Unidos, que reduciría el poderío económico de los cárteles. De momento 16 estado norteamericanos han legalizado el uso terapéutico de la marihuana, aunque los tribunales federales han rechazado su autoridad para adoptar esta decisión.

Desde 2006, año en que Calderón llegó a la Presidencia, al menos unas 40.000 personas han muerto como consecuencia de la lucha que militares y policías libran en todo el país con las organizaciones criminales y de la guerra protagonizada por cárteles rivales para controlar la ruta de la droga hacia Estados Unidos.

VENTA DE ARMAS

En un paso más, el presidente mexicano ha solicitado a su vecino un endurecimiento de la legislación sobre la venta de armas para evitar que armas estadounidenses caigan en manos de criminales mexicanos que actúan con impunidad a través de la frontera común.

Este es uno de los temas más sensibles entre ambos países, debido a la operación ‘Rápido y Furioso’, mediante la cual Washington deliberadamente vendió armas a organizaciones criminales mexicanas para localizar los flujos de venta ilegal de las mismas, sin embargo, la operación se descontroló y acabó reforzando sus arsenales.

CUESTION MIGRATORIA

Por otro lado, el mandatario se ha referido a la inmigración, asegurando que en el último año se ha reducido el número de mexicanos que cruzan la frontera hacia Estados Unidos. «El tráfico neto ha caído a cero y es probable que sea hasta un poco negativo», ha apuntado, citando un informe de la Universidad de Princeton.

«¿Acaso significa esto que la migración hacia Estados Unidos va a detenerse? Por supuesto que no», ha admitido, al tiempo que ha apuntado que lo relevante es que «ahora la fuerza de trabajo mexicana está más formada y más preparada para la competitividad».

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