Nicolás Maduro reanuda los ataques a España, y aunque no mencione a Podemos, sus declaraciones dejan bien a las claras sus aviesas intenciones en apoyo a los integrantes de la formación de Pablo Iglesias, a quienes tanto debe por sus ‘consejos’ de antaño y a quien tanto le deben.
Lo hace tan solo unos días después del regreso a Caracas del embajador Antonio Pérez Hernández, tras ser llamado a consultas el pasado 22 de abril por las «declaraciones intolerables» del presidente de Venezuela.
Este miércoles 7 de mayo de 2015 por la tarde, Maduro aseguró que las relaciones entre ambos países «están en riesgo» y amenazó con
«responder a todas las mentiras, ofensas, insultos que se hacen desde la prensa española».
Maduro está convencido de que
«desde España, las clases políticas y económicas, la elite que gobierna ese país tiene un plan para agredirnos en mayo, yo quiero tener buenas relaciones con este Gobierno sea quien sea, con el que venga, pero lo que yo no puedo aceptar es que se agreda a Venezuela».
El presidente venezolano, cuya intervención durante un acto oficial en Caracas fue retrasmitida en cadena obligatoria de radio y televisión, afirmó además que tiene información sobre
«montajes que hace el Gobierno español o sectores políticos de los partidos dominantes»
para «tratar de influir en las elecciones» que se celebran este mes en España.
«Entonces, de manera electorera y politiquera han colocado a Venezuela y están poniendo en riesgo las relaciones políticas, diplomáticas, económicas, energéticas y de todo tipo entre España y Venezuela»,
continuó.
Los medios de comunicación españoles no se libraron de los ataques del mandatario venezolano:
«Sabremos responder todas las mentiras, ofensas, insultos que se hacen desde la prensa española contra Venezuela».
Entre otras perlas sobre España y sus ciudadanos, dijo que los españoles
«no pueden elegir qué carrera estudiar en la universidad porque todo está privatizado»
y que
«no puede comprar una ‘tablet’ porque la población no tiene suficiente dinero».
Viaje de Felipe González
El ministro de Exteriores español, José Manuel García-Margallo, había manifestado horas antes de la intervención de Nicolás Maduro que no va a pedir al expresidente del Gobierno Felipe González que anule su viaje a Venezuela, previsto para el 17 de mayo.
Margallo señaló además que si se le impide la entrada, será el país iberoamericano el que tenga que valorar «la repercusión en el mundo y en la región».
González tiene previsto viajar a Venezuela para asesorar al equipo de abogados que defiende al líder opositor Leopoldo López, preso desde febrero de 2014, acusado de delitos relacionados con la violencia que se desató tras una marcha antigubernamental.