El presidente de EEUU, Barack Obama, ha rechazado la posibilidad de crear una zona de seguridad en el norte de Siria por cuestiones «prácticas», porque implicaría tomar militarmente gran parte del país.
Obama realizó estas declaraciones en la rueda de prensa que siguió a su reunión en la ciudad alemana de Hannover con la canciller alemana, Angela Merkel, con la que abordó cuestiones como el acuerdo comercial entre su país y la UE, la situación en Siria y Libia, el conflicto de Ucrania, las diferencias con Rusia y la crisis de los refugiados.
El presidente destacó que su rechazo no se basa en una «objeción ideológica» sino una mera «cuestión práctica», ya que es muy complejo establecer una zona de seguridad con éxito, pues hay que destacar un gran número de tropas de tierra, controlar movimientos y establecer controles.
En este contexto, aseguró comprender las razones de quienes han apoyado una zona de seguridad en el norte de Siria, como hizo ayer Merkel, porque respalda el fin último de esta medida, que es dotar de mayor seguridad a los sirios.
Obama subrayó asimismo la importancia que tienen en la estabilización de Siria las conversaciones de Ginebra entre el Gobierno de Damasco, del presidente Bachar al Asad, y la oposición.
También indicó que el alto el fuego debe tratar de mantenerse en las áreas en las que se encuentra la oposición que consideran moderada, pero no en las que están presentes los yihadistas del Estado Islámico (EI) y Al Nusra. Merkel, por su parte, mostró su preocupación por las violaciones del cese de hostilidades que se están produciendo en los últimos días.
El presidente de EEUU llegó este mediodía de domingo 24 de abril de 2016 a Hannover en la que es su tercera y probablemente última visita oficial a Alemania en la última etapa de una gira que le ha llevado a Arabia Saudí y Reino Unido.
Uno de los objetivos de esta visita era relanzar el acuerdo comercial entre su país y la UE, aunque el presidente también quiere reafirmar a sus socios europeos la importancia que para los EEUU tienen una Europa fuerte y unida para afrontar los desafíos que suponen el yihadismo internacional, Siria, Ucrania y la Rusia del presidente Vladimir Putin.