Estados Unidos ha anunciado el despliegue del sistema antimisiles Defensa Terminal para Zonas de Alta Altitud (THAAD, por sus siglas en inglés) en Corea del Sur en respuesta al lanzamiento durante la pasada madrugada de hasta cuatro misiles por parte de Corea del Norte, ha informado la Casa Blanca. (Kim Jong-un se pasa tres pueblos y deja caer tres misiles balísticos en aguas japonesas).
Estos lanzamientos son una muestra más del «comportamiento provocador» de Corea del Norte y por ello Estados Unidos debe demostrar que apoya a sus aliados ante las amenazas, ha argumentado el portavoz de la Casa Blanca, Sean Spicer, en declaraciones a la prensa. «La Administración (de Donald) Trump está tomando medidas para mejorar nuestra capacidad de defensa contra los misiles balísticos mediante el despliegue de baterías THAAD en Corea del Sur», ha explicado. (El misil balístico intercontinental que ha lanzado un explosivo Kim Jong-un: «Un éxito»).
Corea del Sur y Estados Unidos llevan meses especulando con el despliegue de las baterías de defensa antimisiles THAAD, en particular debido a las reticencias de China, que teme que los potentes radares del sistema THAAD sean utilizados con fines de espionaje y que su capacidad de intercepción reduzca su poder de disuasión.
Pekín ha criticado que el THAAD -un sistema de derribo de misiles balísticos de corto, intermedio y medio alcance a través del impacto directo- tiene un rango que podría ir más allá de la península coreana y que podría alcanzar suelo chino.
Por su parte, las autoridades estadounidenses creen que China, como vecino y principal aliado de Corea del Norte, es el mejor situado para influir en Corea del Norte, aunque algunos analistas consideran que esta capacidad de influencia ha menguado en los últimos años.