La página web habilitada por las autoridades británicas para que los ciudadanos se registraran para poder votar en el referéndum sobre la permanencia del país en la Unión Europea en 2016 podría haber sido atacada por «hackers» extranjeros, causando su colapso cuando quedaba una hora para que se cerrara el plazo, según ha informado este miércoles 12 de abril de 2017 un comité de legisladores británicos, que señala a gobiernos como el ruso y el chino como posibles responsable de injerencia sobre el mencionado referéndum.
Los diputados del Comité de Administración Pública de la Cámara de los Comunes señalaron hoy en un informe que no descartan que la web fuera blanco de un ataque extranjero, sin especificar su origen.
El presidente del comité, el conservador Bernard Jenkin, dijo a los medios locales que no hay pruebas claras de un ataque cibernético, pero recalcó que la caída de la página pudo ser provocada por el uso de «bonets» (red de robots informáticos que se ejecutan de manera automática y el artífice puede controlar los ordenadores o servidores infectados de forma remota).
Tras el colapso de la página, el entonces primer ministro británico, David Cameron, decidió extender el plazo para registrarse.
Estas revelaciones salen a la luz tras la polémica por los supuestos ataques cibernéticos de Rusia durante la campaña para las elecciones presidenciales del año pasado en Estados Unidos.
El citado comité parlamentario británico ha pedido al Gobierno que instale un nuevo centro de seguridad cibernética para vigilar posibles ataques en futuros plebiscitos o elecciones británicas, sobre todo si hay intentos de extranjeros por influir en la opinión pública y alterar el proceso democrático.
El informe parlamentario subraya que para EE.UU. y el Reino Unido, un ataque cibernético está basado principalmente en una cuestión técnica o de red informática, pero los ataques de Rusia o China están pensados para influir en la psicología de la población.