Lo importante es que no es una opción totalmente descartada y si el dictador Nicolás Maduro y sus sicarios chavistas persisten en sus tropelías, lo que parece seguro, volverá el asunto a primer plano en la Casa Blanca.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, planteó hace varios meses a su Gabinete la posibilidad de invadir Venezuela alegando cuestiones de seguridad nacional, según informaron este miércoles medios locales.
Si bien no han trascendido muchos detalles de esta conversación, se sabe que ésta tuvo lugar hace meses puesto que Trump expuso esta opción durante un encuentro con el secretario de Estado, Rex Tillerson, y el asesor de seguridad nacional de la Casa Blanca, H.R. McMaster, quienes ya no forman parte del Ejecutivo.
De acuerdo con la cadena CNN, que cita fuentes próximas al presidente que pidieron el anonimato, el mandatario valoró esta posibilidad en uno de los momentos de mayor tensión entre Washington y Caracas y esgrimió cuestiones de seguridad nacional para defender esta medida.
En todo caso, de acuerdo con dicha fuente, la posible invasión del país latinoamericano «nunca fue una opción inminente».
En agosto del año pasado el mandatario estadounidense ya dijo en público que no descartaba una «opción militar» para resolver el «muy peligroso lío» que atravesaba Venezuela, sumida entonces en una oleada de protestas antigubernamentales que dejó más de 120 fallecidos.
«Fusiles en Nueva York»
Apenas un día después de estas declaraciones, Nicolás Maduro Guerra, hijo del gobernante venezolano, Nicolás Maduro, advirtió a Trump de que el país petrolero respondería con «fusiles en Nueva York» y tomaría la Casa Blanca en caso de una invasión militar estadounidense.
La relación entre Estados Unidos y Venezuela se encuentra especialmente enquistada desde que Trump asumió la presidencia en enero de 2017.
Fruto de esta tensa relación, en los últimos meses, la Casa Blanca ha aplicado numerosas sanciones contra funcionarios y empresas venezolanas e, incluso, llegó a promover una resolución para iniciar el proceso destinado a suspender a Venezuela de la Organización de Estados Americanos (OEA).