Este martes 25 de septiembre, el gobierno de los Estados Unidos, en búsqueda de presionar al régimen chavista y generar un cambio de rumbo en Venezuela, anunció nuevas sanciones económicas contra «el círculo cercano» del presidente venezolano, Nicolás Maduro, incluida su esposa, Cilia Flores. (Trump embiste a la tiranía de Maduro y a la tragedia socialista en la Asamblea General de la ONU)
Treasury targets Venezuelan President Maduro’s inner circle and proceeds of corruption in the US https://t.co/UrXx3CJ5Cs
— Treasury Department (@USTreasury) 25 de septiembre de 2018
El secretario del Tesoro, Steven Mnuchin, a través de un comunicado anunció: «El presidente Maduro confía en su círculo cercano para mantener su control del poder, a medida que su régimen sistemáticamente saquea la riqueza de Venezuela. Continuamos sancionando a sus socios más leales que permiten que Maduro refuerce su control sobre los militares y el Gobierno mientras el pueblo sufre»
«Como parte de los esfuerzos de la Oficina de Control de Bienes Extranjeros, publicamos una lista de individuos y compañías de propiedad o controladas por, o que actúan en nombre de los países objetivo», afirma el comunicado.
«Colectivamente, estos individuos y compañías son denominados ‘Nacionales Especiales Designados’ o SDN (por sus siglas en inglés). Sus bienes son congelados y se les prohíbe a los estadounidenses hacer negocios con ellos».
En la lista del Departamento del Tesoro, además de Cilia Flores, se destacan Vladimir Padrino López, ministro de Defensa, a los hermanos Jorge y Delcy Rodríguez, que se han paseado por diferentes altos cargos en los gobiernos de Chávez y Maduro. (La ONU nombra a un representante especial para atender la crisis migratoria venezolana)
La lista también incluye al jefe de la Agencia de Vehículos Especiales Rurales y Urbanos (Averuca), José Omar Paredes; el hermano del también sancionado Rafael Sarría y directivo de las compañías Quintana Trading y Panazeate SL, Edgar Sarría.
Según la nota de prensa del Departamento del Tesoro, se les impuso la medida por su relación con los sancionados, miembros del Gobierno del presidente Nicolás Maduro y con el presidente de la Asamblea Nacional Constituyente (ANC), Diosdado Cabello.
El Tesoro estadounidense remarcó sus incentivos hacia los coalboradores de la dictadura, diciendo que el castigo «no es permanente» y que tiene como meta «cambiar el comportamiento» de Caracas.
Desde el año pasado, Washington viene dictando una serie de sanciones contra altos funcionarios del régimen venezolano que preside Nicolás Maduro. Entre los penalizados está toda la cúpula chavista: el propio Nicolás Maduro; el número dos del PSUV, Diosdado Cabello y el vicepresidente Tareck El Aissami. A todos se los investiga por nexos con el narcotráfico, el terrorismo y hechos de corrupción.