Este miércoles 26 de septiembre de 2018, Donald Trump volvió a referirse a Venezuela, pero en un tono más enérgico, al ser interrogado por los periodistas, en el marco de la Asamblea General de la ONU, dejó claro que para los Estados Unidos la situación de Venezuela es preocupante y que amerita que se tenga en cuenta todas las opciones posibles.
Todas las opciones están sobre la mesa, las fuertes y las no tan fuertes, y saben a que me refiero con ‘fuertes’
En cuanto a la posibilidad de un encuentro con el tirano venezolano, Nicolás Maduro, aseveró: «Si él estuviera aquí, si quisiera reunirse, esto no estaba en mi mente, esto no estaba en mi plan, pero si puedo ayudar a la gente es para eso que estoy aquí».
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«Sólo quiero ver a Venezuela enderezada. Quiero que la gente esté a salvo. Vamos a ocuparnos de Venezuela», agregó.
El pasado martes, luego del encuentro que sostuvo con el presidente Colombiano, Trump habló de la responsabilidad de las Fuerzas Armadas venezolanas y dijo que la dictadura de Maduro «Es un régimen que podría ser derrotado muy rápidamente si los militares lo deciden».
Mientras que antes, en el discurso de la 73º sesión de la Asamblea General de la ONU, el Presidente de los Estados Unidos, se refirió a las sanciones que había impuesto la Oficina Nacional del Tesoro estadounidense en contra del «circulo cercano» de Maduro y de las terribles consecuencias que había dejado el socialismo a Venezuela, siendo un país tan rico.
La situación de Venezuela es crítica, luego de los gobiernos de Chávez y Maduro el país registrará una inflación superior al millón por ciento este año, según cálculos del Fondo Monetario Internacional. Aunado a lo anterior, la escasez de medicamentos y alimentos han generado que los venezolanos huyan de su país, habiéndose ya registrado más de dos millones de migrantes, y poniendo a prueba las capacidades de los países Sudamericanos para atender esta crisis migratoria sin precedentes