Donald Trump ha asegurado este martes que en «30 días ya no quedará ningún» yihadista de Estado Islámico (EI) activo militarmente en Irak y Siria, mientras que su Gobierno apunta que al grupo terrorista le queda solo un 1% del territorio que llegó a dominar en 2014 (Así destruyó el ISIS la mezquita y dejó al descubierto un palacio de 3.000 años de antigüedad).
«Hemos hecho un trabajo muy importante con el EI. Ahora quedan muy pocos en esa área, y dentro de otros 30 días no quedará ya ninguno de ellos».
El mandatario se pronunció así al firmar una ley que busca aumentar los esfuerzos del Departamento de Estado de EEUU para ayudar a las víctimas de genocidio o crímenes contra minorías cometidos por el EI en Irak y Siria.
Por su parte, el enviado especial de EEUU para la coalición contra el EI, Brett McGurk, ha reiterado que a ese grupo terrorista le queda solo un 1% del territorio que llegó a dominar en 2014, cuando proclamó un califato en Siria e Irak.
Ese 1% está repartido por diferentes partes del valle mediano del Éufrates, donde se encuentra la localidad de Hayín, uno de sus últimos bastiones en el este de Siria.
«Estamos en el último 1% de la lucha militar convencional», ha apuntado McGurk, y reconoce que «llevará tiempo» acabar por completo con la amenaza del EI, que perderá en un «período de meses» Hayín.
«El objetivo militar es la derrota duradera del Estado Islámico. Y si hemos aprendido una cosa a lo largo de los años es que la derrota de un grupo terrorista asío significa que no se le puede vencer solo en su espacio físico y luego irse».
Por eso EEUU tiene previsto mantener tropas sobre el terreno durante un periodo largo para «estabilizar» la zona. El país lidera desde mediados de 2014 una coalición internacional formada por más de 60 países que tienen como objetivo acabar con el terrorismo yihadista.