La embajadora designada por Juan Guaidó, María Faría, tomó el control de la Embajada de Venezuela en Costa Rica. A través de un comunicado de prensa, se ha informado que los representantes del Gobierno de Nicolás Maduro fueron cesados de sus funciones, ya que seguían trabajando en la sede diplomática, ubicada en Los Yoses, San José, de manera irregular. (Agregado militar de Venezuela ante la ONU reconoce a Juan Guaidó y rechaza al dictador)
«Una vez cubiertos los trámites legales estipulados por la ley, hemos venido a la Embajada para avanzar con el proceso de transición, que encabezan la Asamblea Nacional de Venezuela y el presidente Juan Guaidó para restituir el orden democrático. Eso pasa por garantizar el respeto a los derechos de nuestros connacionales fuera del territorio venezolano», manifestó Faría. («Soldado escucha»: La campaña de Juan Guaidó para los militares venezolanos)
La representante se hizo presente en Los Yoses con varios integrantes de una firma de auditores de reconocimiento internacional, así como con un equipo de asesores jurídicos y algunos testigos, quienes velarán por «el correcto desempeño de la jornada en la que se evalúan las condiciones de la sede diplomática, resguardo de material sensible y pertenencias del Estado venezolano».
La ‘toma’ de la embajada se realizó luego de que Costa Rica reconociera, desde el pasado 1.° de febrero, a Faría como diplomática de Venezuela en el país.
Ese día el presidente de la República, Carlos Alvarado, afirmó que el reconocimiento «excluye cualquier otro tipo de reconocimiento de otro origen”.
La funcionaria agradeció a las autoridades y el pueblo costarricense y destacó que seguirán en una “lucha incansable por la defensa de la democracia”.
Agregó que en un corto plazo espera reanundar el servicio consular para los venezolanos en suelo tico.