Las dramáticas condiciones que sufren los venezolanos se ven acentuadas con el masivo apagón que afecta a casi todo el país. En la salud, los casos más resonantes son los de los pacientes que necesitan la diálisis, pero la angustia inunda las salas de emergencia, que no atienen al público. (Guaidó solicitará al Parlamento decretar el «estado de alarma nacional» ante el masivo apagón)
Este domingo, tras pasar la tercera noche en penumbras, las redes sociales viralizaron las impactantes imágenes de una madre que tiene al cadáver de su hija en brazos, en las afueras de una morgue en Valencia, en el estado de Carabobo. (El presidente Guaidó capitaliza la rabia del apagón venezolano y anuncia escalada contra el tirano Maduro)
Aunque la víctima tenía 19 años, su extrema desnutrición la llevó a pesar apenas 10 kilos, por lo que su madre la carga sin excesivo esfuerzo.
«La doctora me dije que ya terminaron su jornada, como no hay luz.
Entonces iba a llevarla a Las Lomas«, comienza a narrar la mujer. El cuadro empeoraba cada vez más. «Empezó a eructar y eructar. De repente se quedó tiesa. Volví corriendo a mi casa a buscarla a mi (otra) hija», relató.
Con ayuda de las autoridades, llegó hasta otro hospital, pero la suerte fue la misma. «La policía me dejó en la puerta y la doctora me dice que no la pueden atender, no hay nada«, señaló.
Hasta la muerte es indigna en Venezuela. Periodistas locales reportan una profunda hediondez en las morgues, ante la falta de refrigeración de los cuerpos.
Luego, en las funerarias, muchas aceptan prestar el servicio en el apagón, siempre que los clientes firmaran pagarés para asumir los gastos. «Han sido velaciones cortas, de 6 a 7 horas, porque la misma gente al ver que no hay iluminación se va temprano«, dijo Carlos Peña, encargado de una funeraria al este de la ciudad.
Los hospitales que tienen generadores de energía los usan para emergencias. «Esto ha sido horrible. Todo oscuro. Solo funcionan algunas áreas con una planta eléctrica que llevaron porque la del hospital no funcionó«, dijo a AFP Sol Dos Santos, de 22 años, quien tiene a su niña hospitalizada en Caracas.
Bajo la gestión de Nicolás Maduro, Venezuela cayó en la peor crisis de su historia contemporánea, con marcada escasez de fármacos y una hiperinflación que este año escalaría a 10.000.000%, según el FMI, lo que ha forzado un éxodo de 2,7 millones de venezolanos desde 2015, según la ONU.
El director de la ONG Codevida advirtió que la cifra de decesos puede incrementarse por las complicaciones propias de la insuficiencia renal. «Hemos conseguido a pacientes edematizados debido a la falta de diálisis. Luego viene la hinchazón de las extremidades, lo que podría ocasionar un paro cardíaco y otras complicaciones que podrían llevar a la muerte de más de 10.200 personas en diálisis en el país», remarcó.