«Todas las opciones están sobre la mesa». La mítica frase de los últimos meses dentro de la oposición venezolana es una forma de dejar ver entre líneas la posibilidad de autorizar una intervención militar internacional que acabe con la dictadura de Nicolás Maduro. Un proceso que, sin embargo, no resulta tan sencillo como parece. El presidente interino de Venezuela, Juan Guaidó, tuvo un gesto a favor de la intervención humanitaria a través de la inscripción en el Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca (TIAR), pero donde se ha dado un importante paso.
Tras la aprobación del TIAR por parte de la Asamblea Nacional en segunda discusión, el presidente interino ha dado el segundo paso para lograr la intervención en Venezuela: enviar el instrumento de ratificación a la Organización de Estados Americanos (OEA), con quienes mantiene una relación muy cercana.
Justamente, Luis Almagro, Secretario General de la Organización de Estados Americanos (OEA), comunicó que el representante permanente de Venezuela, Gustavo Tarre Briceño, le entregó la solicitud de reintegro al Tratado Interamericano de Asistencia Recírpoca (Tiar), impulsada por la Asamblea Nacional (AN) y el presidente encargado Juan Guaidó.
Recibí del Representante Permanente de #Venezuela ante la @OEA_oficial Gustavo @tarrebriceno comunicación respecto al reingreso de Venezuela al #TIAR. #OEAconVzla pic.twitter.com/ddHhaTWqzo
— Luis Almagro (@Almagro_OEA2015) July 31, 2019
Los pasos que quedan
Dicho instrumento de ratificación será registrado por la OEA y anunciado al resto de los Estados Miembros (a pesar de que ninguno puede vetar la entrada de Venezuela). Una vez terminado estos trámites, se dan las circunstancias para dar el cuarto paso e inicio del proceso para una intervención militar.
Los representantes de Juan Guaidó tendrán que redactar la solicitud de la creación de una fuerza interamericana donde argumenten táctica y jurídicamente los motivos de la petición, así como presentar la misma ante la OEA. En este momento, los miembros del TIAR analizarán y votarán la decisión de si aprobar o no una intervención militar (que requiere el visto bueno de dos terceras partes). Si se logran los votos a favor, cada Estado anunciaría qué tropas y recursos podrá a disposición, se procederá a la unificación de las fuerzas y se estudiará si dar o no un ultimátum a la dictadura de Maduro.
Finalmente, el órgano de consulta también establecerá los términos y condiciones tanto del alcance de la acción militar tanto el proceso de su salida del territorio nacional. En este sentido, la única intervención militar que podría tener un plazo más corto e inmediato sería una acción encabezada por Estados Unidos con motivos humanitarios.