¿Dónde está el fútbol de Brasil?

¿Dónde está el fútbol de Brasil?

(Felipe Valdés, Periodista latino).- Ganó y está en octavos de final, es verdad, pero Brasil aún no ha comenzado a jugar en el Mundial de Alemania 2006. Las críticas le llueven a la selección brasileña tras el partido opaco que ofreció este domingo frente a Australia, y pese a su resultado (2-O) que ha clasificado al cuadro sudamericano y favorito del encuentro deportivo por excelencia. Esto es lo que dice la prensa.

Marca, el principal deportivo español – y el periódico más leído en España- asegura que:

«Brasil consiguió la clasificación para los octavos de final del Mundial del Alemania al vencer (2-0) a Australia en la segunda jornada del Grupo F. El combinado dirigido por Carlos Alberto Parreira mejoró con respecto al primer partido ante Croacia, pero demostró que no está en su mejor momento. Un gol de Adriano y otro de Fred, cuando el partido agonizaba, dio el triunfo a la selección brasileña sobre una Australia que tuvo sus opciones».

As, también español, comienza su crónica afirmando que «Robinho maquilla a brasil»:

«Alarmante lo de Brasil, que van ya dos veces y no es casualidad. Más de lo mismo hasta que salió Robinho y animó la tarde de Múnich. El Jogo Bonito está como Togo, casi de huelga. Y el equipo, a años luz de Argentina, de España y del último partido de Ghana, con el que se pueden cruzar en octavos. Está el campeón como aplatanado y no será por el amarillo de la camiseta precisamente. Porque si se le reconoce es sólo por ella. El 2-0 es mentirosillo, como el 1-0 ante Croacia. Si croatas y australianos tienen un delantero, uno solo, a estas alturas está Brasil con dos puntos y pintando el partido con Japón como la Tercera Guerra Mundial. Es que los ves y no los reconoces».

El periódico chileno, La Nación se pregunta: ¿Dónde están la magia y la alegría del Scratch?:

«Cuando en los días previos el técnico de Australia, el holandés Guus Hiddink, y el ariete Mark Viduka anunciaban que podrían dar la sorpresa ante Brasil, pocos les daban crédito. Al frente estaba el máximo favorito con su constelación de figuras, como para pensar que las declaraciones de los oceánicos no eran más que frases para el bronce. Pero Brasil está lejos de ratificar sus pergaminos. Si los pentacampeones dejaron dudas en el debut, ante los australianos éstas pasaron a ser preocupación».

Clarín, de Argentina no se queda atrás en la decepción:

«Brasil es de temer por una simple cuestión: gana aun cuando no juega bien. O si se quiere: cuando está a un paso de jugar mal, como ayer en la soleada y calurosa Munich. Le bastaron un par de arrestos individuales y el talento de Kaká para abrazar su segundo triunfo (opaco) y meterse en los octavos de final.

¿Sin despeinarse? No, esta vez no: se despeinó bastante porque el segundo gol, el de Fred, llegó a los 44 del complemento, cuando Australia les estaba cascoteando el rancho a Dida y compañía. ¿Qué hubiera pasado si los australianos se hubiesen acordado antes de atacar, de que en este deporte hay que hacer goles para escribir historias grandes?».

El deportivo español Mundo Deportivo titula el tema con «Brasil juega a medio gas»:

«¿Es Brasil víctima de su potente márketing? Parece una selección vulnerable, da menos miedo de lo esperado y su juego, ni bonito ni feo, no convence. Pero Brasil está en octavos, ha marcado tres goles y no ha encajado ninguno y sus cracks no dan la impresión de haberse desgastado en exceso, a pesar de ser los objetivos principales de los rivales».

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