McElroy estaba a unos 90 metros de la casa en el momento del disparo
El armadillo casi causa de una desgracia familiar, aunque al final no ha habido muertos de por medio, que sí una anciana herida que no sale de su asombro.
El suceso, del que da cuenta ‘Mirror’, tuvo lugar ese domingo 12 de abril de 2015 en Gosa Road, Georgia, cuando a un tal Larry McElroy, de 54 años, le dio por disparar con un arma 9 milímetros a un armadillo fuera de su casa.
DE REBOTE Y TIRO PORQUE ME TOCA
La bala mató al animal, pero también rebotó, cruzó una cerca, atravesó la puerta trasera de la casa rodante de su suegra y la silla en la que estaba sentada la mujer de 74 años, y la impactó en la espalda.
McElroy estaba a unos 90 metros de la casa en el momento del disparo.
La suegra de McElroy, Carol Johnson, fue llevada al hospital, pero según informaron no corre a peligro.