Alejandro Nesteruk, de 40 años, al que todos ya conocen como el «samurai cordobés», no los mató de milagro tras el asalto a su vivienda en la argentina provincia de Córdoba.
Les dio lo que no está escrito con una espada catana, provocarles serias heridas cortantes a tres asaltantes armados, quienes les habían propinado a él y a su esposa una brutal paliza durante la madrugada del viernes 10 de abril de 2014 en el barrio Cerro Norte de la capital de «La Docta».
Los tres heridos, quienes fueron detenidos tras una persecución, fueron sometidos a intervenciones quirúrgicas y están internados con fuerte custodia policial en habitaciones separadas.
MÚLTIPLES HERIDAS
Sufrieron graves lesiones cortantes en rostro, brazos y abdomen. En este sentido, Gustavo Matus, médico del Hospital de Urgencias de Córdoba, afirmó:
«Han recibido múltiples heridas cortantes. Uno de ellos en el miembro superior y el tórax, otro tiene una lesión grave en la mano y miembros inferiores y el restante tiene signos de una lesión cortante en el rostro».
«Son cortes múltiples, algunos de ellos profundos y requieren cirugía. Los tres fueron al quirófano sucesivamente para la reparación de sus lesiones»,
Asimismo, la Justicia ordenó que Nesteruk sea sometido a una «prueba psiquiátrica», reveló su esposa, Gabriela Monge. La mujer sostuvo que ella y su marido «no pudieron descansar desde el viernes», ya que aún se encuentran en «estado de shock» por la traumática situación.
El hecho sucedió el viernes a la madrugada. Tres delincuentes, uno de ellos armado con una pistola 9 milímetros, ingresaron a la casa de la familia del «samurai».
Golpearon al matrimonio. En un descuido, el dueño de casa se apoderó de una espada catana y se defendió.
El hombre reaccionó cuando llevaron a su mujer a otro sector de la casa. El «samurai» les provocó heridas y los puso en fuga.
Dejaron un reguero de sangre y ascendieron a un automóvil Peugeot 206 gris, donde se encontraba un cómplice. Luego de una persecución policial, el vehículo colisionó contra un árbol, aunque todos los ocupantes huyeron.
Minutos después, en una vivienda del barrio Villa Serrana, fueron detenidos tres hombres y una mujer. Dos de ellos tenían lesiones profundas en los antebrazos y el rostro.
Más tarde fue detenido otro sujeto que se presentó en el dispensario de Saldán, con heridas cortantes en los antebrazos. La Policía recuperó los 3.600 pesos que le habían robado.