Una mañana de 2008, Naomi Jacobs de 32 años de edad, despertó en una casa que no conocía, siendo madre de un niño que no reconocía y pensando que tenía 15 años.
Jacobs, que es británica, no sufría de ningún trauma cerebral.
Sus recuerdos personales desaparecieron debido a una rara forma de amnesia disociativa, que es inducida por el estrés.
«Al principio no reconocí la habitación ni la cama en la que me desperté. Salté de la cama en estado de shock»,
dijo Jacobs a la BBC.
Según la Clínica Mayo, la amnesia disociativa o psicógena, es resultado de una conmoción emocional o trauma.
La condición causa una pérdida de los recuerdos personales y la información autobiográfica pero normalmente sólo por un breve tiempo.
«Afortunada»
Jacobs, que detalla su experiencia en su nuevo libro, Forgotten Girl, dijo que pensaba que estaba soñando, hasta que vio su cara en el espejo del baño.
Al despertar, su último recuerdo fue quedarse dormida la noche anterior en la litera que compartía con su hermana cuando era adolescente.
Mientras Jacobs recordaba las tareas relativas a su memoria automática, como conducir un auto y marcar determinados números de teléfono, no recordaba los recuerdos relacionados con su vida personal, tales como bodas, muertes e incluso dar a luz a su hijo Leo de diez años de edad.
«Me encontraba en shock, en completo shock» dijo Jacobs a la BBC al recordar el momento en el que vio a su hijo cuando despertó.
«Sentí todo. Desde miedo hasta alegría de ver a este niño del que no tenía recuerdo de dar a luz, pero que sabía que era mío porque se parecía mucho a mí. Estaba convencida de que iba a volver a dormir esa noche y despertarme en 1992. Para mí no era real lo que estaba pasando»,
añadió.
Jacobs explicó cómo las cosas más normales hoy en día, desde teléfonos inteligentes hasta la televisión digital, la tenían perpleja, pero dijo que está feliz de haber tenido la oportunidad de ver el mundo a través de los ojos de su yo más joven.
«Me siento muy afortunada en ese sentido porque a la edad de 15 te imaginas donde vas a estar a la edad de 32 años, y luego cuando despiertas 17 años más tarde ves que tu vida y el mundo no son como te los habías imaginado. Pero verlo todo de nuevo con mis nuevos ojos de 15 años de edad, me dio una perspectiva fresca y nueva»,
dijo a la BBC.
Jacobs sufrió este episodio de amnesia durante ocho semanas tras las cuales su memoria comenzó a volver a la normalidad.
Mirar a través de diarios viejos le ayudó a poner las piezas de su vida juntas.