"Ma, cuando te vi, mi instinto fue correr"
La imagen de Toya Graham ha dado la vuelta al mundo. ¿El motivo? Sacar a su hijo de 16 años, a base de bofetones, de una manifestación antirracial en protesta por la muerte de un joven negro en Baltimore.
Un acto, para muchos heróico y que debería servir de ejemplo para otros padres, que la ha convertido en la «madre del año».
En declaraciones a la cadena CBS, Graham explicaba qué es lo que la llevó a reaccionar así:
«Vi a mi hijo entre la multitud. Estaba ahí, cruzando al calle con su capucha y una máscara. Y en ese momento lo perdí. Es mi único hijo varón y no no quería que al final del día se convirtiera en otro Freddie Gray (el joven negro muerto en una comisaría cuyo caso causó la revuelta). Pero ponerse allí de pie, cometiendo actos vandálicos frente a la policía no es hacer justicia».
MUY ENFADADA
Después de que su video diera la vuelta al mundo y hasta el jefe de policía de Baltimore alabara su actitud, esta madre soltera de seis hijos, relató:
«Estaba muy enojada y sorprendida porque uno nunca quiere ver a su hijo en esa situación».
La mujer dijo que su hijo supo que estaba en problemas en el momento en el que la miró a los ojos.
«Soy una madre intolerante. Todo el que me conoce sabe que no me ando con juegos»,
dijo Graham, y contó que su hijo le dijo: «Ma, cuando te vi, mi instinto fue correr».
Los disturbios en Baltimore, que llevaron a la Guardia Nacional estadounidense a desplegar 5.000 hombres y establecer el toque de queda, comenzaron horas después del funeral de Freddie Gray, quien murió de lesiones vertebrales sufridas bajo custodia policial.
«Sé que no puedo protegerlo toda mi vida. Él tiene 16 años y está en la calle. Sólo elijo no vivir así más y no quiero esto para él»,
dijo Graham.