Lo suyo es de película… casi de ciencia ficción.
Karin Jansma, de 33 años y madre de tres hijos, estaba hasta las narices de que la llamaran «fofa» y «vieja», y por eso se entrenó como una fiera para conseguir su sueño y callar la boca a todos:
«La salud y el estado físico siempre fueron un aspecto importante de mi vida, pero realmente me había hundido en una muy mala relación. Quería dar un vuelco, fortalecerme y reconstruir la confianza en mi misma»,
contó esta instructora de yoga y pilates a ‘Daily Mail Australia‘.
AL GIMNASIO DE CABEZA
Lo primero que hizo fue inscribirse en un gimnasio, para recuperar la buena forma que había tenido antes de los desengaños amorosos. Rápidamente, las cosas pasaron a otro nivel: uno de los instructores le vio potencial al poco de conocerla y le propuso inscribirse en un concurso de belleza y musculatura, Muscle Mania Australia.
Empezó un duro entrenamiento, que comenzaba todos los días a las cinco de la mañana, y que incluía una estricta dieta.
Desde que ganó el concurso, siente que puede conseguir lo que se proponga
Volvió a ser feliz y a recuperar el equilibrio entre su familia y ella misma
Sólo 16 semanas después de haber comenzado, ya era otra persona. Se sentía a gusto con su cuerpo y había recuperado la confianza. Aún así, no creía tener la más mínima posibilidad de ganar. Pero lo consiguió: obtuvo el primer puesto en la categoría de Modelo fitness.
Jansma participó también en la categoría de modelaje con bikini, pero no le alcanzó para ganar
Se alzó con la presea de Modelo fitness, gracias a su imponente figura.
«Fue surrealista. No caí por varios días. Pero desde que gané la competencia siento que se me abrieron muchas puertas, y que mis sueños y metas son más grandes que nunca, y ya no me asustan».
