La madre de la niña, de 26 años, también ha sido acusada de homicidio. Dejó a la víctima con otros cinco niños, de 2, 4, 6, 7 y 8 años, para irse a un club
No ha sido identificado pero se ha convertido con ocho años en una de las personas más jóvenes en ser acusadas de asesinato en Estados Unidos. El 12 de octubre, este niño mataba presuntamente a golpes a Kelci Devine Lewis, una pequeña de 18 meses. La razón, no paraba de llorar.
Otro menor de seis años presenció los hechos. La madre de la niña, de 26 años, también ha sido acusada de homicidio. Dejó al bebé con otros cinco niños, de 2, 4, 6, 7 y 8 años, para irse a un club.
El menor, de ocho años, quien no ha sido identificado pero es el principal sospechoso de matar a golpes a Kelci Devine Lewis, una bebé de 18 meses, porque esta no paraba de llorar. La niña fue hallada inconsciente en su cuna el pasado 12 de octubre en Birmingham, Alabama, con visibles golpes en la cabeza. También tenía lesiones internas.
SE FUE A UN CLUB
La madre de Kelci había dejado al bebé con otros cinco niños de de 2, 4, 6, 7 y 8 años, para irse a un club nocturno. Ahora, ella también se enfrenta a cargos por homicidio.
Un niño de 6 años que fue testigo de la fatal paliza ha sido clave para determinar lo sucedido. El menor acusado del crimen está bajo cuidado de la agencia de bienestar infantil. Su caso se tramita a través del sistema de la corte familiar dado que en Alabama no existe una edad mínima para ser juzgado.
Del menor poco se sabe, un agente ha apuntado que se muestra afectado psicológicamente por lo sucedido. «Va a necesitar algún tipo de intervención extrema», ha explicado. El caso es tan brutal que hasta la policía no da crédito a lo ocurrido: «Esta es una de las investigaciones más terribles que he visto en más de 30 años de carrera», aseguró A.C. Roper, jefe policial de Birmingham.