James Dearman ha sido acusado de homicidio imprudente porque presuntamente ha aplastado a su hijo de 6 años en el sofá mientras juagaba a un videojuego. El padre, que pesa 122 kilogramos, intentaba mandar al pequeño a la cama y como este le desobedecía le mandó tumbarse en su lado del sofá . Cuando Dearman se sentó le asfixió hasta muerte.
El padre intentaba que sus dos hijos se fuesen a la cama mientras él jugaba a un videojuego junto a su novia. Como ninguno de los niños le hacía caso les mando castigados contra la pared. Uno de ellos giraba todo el rato la cabeza para cotillear el videojuego de Dearman, por lo que decidió que necesitaba un escarmiento, según informa ‘Daily Mail‘.
Una de las veces su padre le vio y le ordenó que se tumbase en su lado del sofá, para sentarse encima. Dado que pesa 122 kilogramos, hizo inevitable que aplastase y asfixiase a su hijo. Su hermano le ha confesado a la policía que el pequeño forcejeaba y chillaba, ignorado por su padre.
Además, ha contado que después de lo ocurrido fueron a fumarse un cigarro al garaje y hasta que no volvieron unos minutos después, no se percataron de que el pequeño no podía respirar.