Allí está: colgado como un mono de una cornisa, en pelota picada. Le acaba de sorprender el marido de su amante, y no se le ocurre nada mejor, -ante la falta de argumentos-, que intentar escapar por la ventana.
No fue desde luego una airosa salida, ya que al poco se hace un lío con unos cables y cae al vacío de una manera lamentable, ante el asombro de los transeúntes.
Ocurrió, como no podía ser de otra manera, en una ciudad china.
El vídeo corre por las redes sociales como alma que lleva el diablo. Poco o nada se sabe de la suerte del protagonista, auque se intuye que se partió algo más que los cuernos…