No acabó en tragedia de puro milagro. Y todo por una estupidez que obligó al piloto de la compañía irlandesa Ryanair a tomar una drástica decisión: realizar un aterrizaje de emergencia en Pisa, mientras el avión cubría la ruta entre Bélgica y Malta.
Según da cuenta ‘The Sun‘, el motivo fue una pelea a bordo que involucró a varios pasajeros a unos 9.000 metros de altura. Uno de ellos incluso golpeó en la cara a una azafata que intentaba poner paños fríos a la situación.
«Todo comenzó cuando una mujer acusó a uno de los alborotadores de haberla golpeado en la cabeza, lo que derivó en una fuerte pelea con dos hombres que intentaron intervenir»,
aseguró uno de los testigos del hecho, quien logró filmar lo ocurrido.
La compañía ha señalado que el aterrizaje de emergencia se realizó sin problemas y que cuatro pasajeros fueron detenidos por la Policía italiana.
«No toleraremos un comportamiento inapropiado y perturbador; la seguridad de nuestros clientes, la tripulación y la aeronave son nuestra prioridad número uno»,
indicó un portavoz de la aerolínea.