Ocurrió en julio de 2016, y el distrito neoyorquino de Brooklyn fue el escenario de todo un auténtico ‘episodio zombi’: decenas de personas deambulando por las calles desorientadas, vomitando y echando espuma por la boca. Algunas incluso perdieron la conciencia y cayeron al suelo.
Un análisis publicado esta semana en la revista ‘The New England Journal of Medicine’ ha confirmado las sospechas y revela la causa de una escena que parecía una película de ficción. Eran los virulentos efectos de una espeluznante droga. (La ‘flakka’ llega a España y elige Magaluf para liarla gorda: dos ‘zombis’ casi mueren).
El científico de la Universidad de California Roy Gerona ha analizado la sangre y orina de las 33 personas que tuvieron que ser hospitalizadas tras el incidente. El estudio concluye que sufrieron una sobredosis de una marihuana sintética conocida como K2, Spice o Fubinaca, que es 85 veces más potente que el cannabis común.
Este estupefaciente suele causar en quienes lo consumen múltiples estragos, entre ellos una excesiva sudoración y mirada perdida mientras que su frecuencia cardiaca permanece normal. Como apunta Gerona, los movimientos de los afectados se tornan lentos y mecánicos, y hasta «durante períodos intermitentes hacen gemidos de zombi».
El científico se muestra preocupado por el aumento del acceso a las drogas sintéticas en el mercado negro, donde es fácil obtenerlas. Gerona pretende junto a sus colegas «llamar la atención de los responsables de la formulación de políticas» sobre la materia, ya que es «un problema urgente que necesita una solución».