Jennifer Doering, una madre de Wisconsin, quería sorprender a su hija por Navidad con información sobre sus antepasados. La mujer quería regalar algo muy especial a Audrey, que fue adoptada.
Por ello, Jennifer se lanzó a la búsqueda por Internet. Vio varios anuncios en los periódicos chinos y contactó con una web especializada en buscar información sobre los niños que habían sido dados en adopción.
La página contenía datos sobre Audrey y, además, tenía una fotografía de la niña que había sido tomada en el orfanato. Jennifer decidió comprarla.
Cuando la imagen llegó, la madre descubrió que en ella salía otra niña idéntica a Audrey, según informa ‘NBC’.
Los padres llegaron a la conclusión de que su hija tenía una hermana gemela. Pasaron días buscando información en distintos las páginas de varios orfanatos y descubrieron que otra familia había adoptado a la niña en el mismo orfanato.
La casualidad hizo que la familia de Gracie, que así se llama la otra niña, viviera también en el estado de Wisconsin.
Las dos hermanas pudieron conocerse gracias a una videollamada y desde entonces no han parado de hablar.