La noticia de Zhang y Zhou, una pareja de Taiwán, se ha vuelto a hacer viral pese a tener unos años, merced al diario ‘Crónica‘. La misma da cuenta de la triste noche de bodas de ambos, tras la ceremonia de rigor y después de haber sido novios durante seis meses, tiempo en que el hombre se las ingenió para no intimar más de la cuenta y revelar su secreto. Alegaba que pertenecía a una religión en la que el sexo premarital estaba prohibido, y era considerado pecado.
La mujer decidió respetar a su amado, aunque poco tardó en descubrir el pastel: tenía un pene muy pequeño, algo que le cabreó sobremanera:
«Su pene es tan pequeño como el de un niño, sólo mide 5 centímetros»,
protestó la mujer de 52 años de edad.
El pobre marido quiso compensarla, y le prometió que tendrían relaciones tres veces por semana, pero según la mujer, él no cumplió y ella le exigió que buscara un tratamiento para la impotencia.
Zhou, afirma que la disfunción eréctil no está relacionada a un problema médico, más bien a una elección «personal».
«Yo prefiero amarla por la mañana, pero ella estaba aferrada a hacerlo a la medianoche, para entonces yo ya estoy muy cansado», explicó Zhou.
La iracunda optó por divorciarse, argumentando que con tan poco cosa nada podía hacer.