Will Zeven, no anda según algunos sobrado de luces. El peruano, que parece algo empanado, ha perdido un testículo tras recibir una certera patada en la entrepierna durante un absurdo juego, que pretende que es gracioso.
Zeven se filmó por la calle desafiando a las mujeres a que le den «un beso o una patada en los huevos». El joven juega con ellas a piedra, papel o tijera y si gana le dan un beso, si pierde, una patada en los testículos.
Cuando perdió contra una chica la joven reveló: «Había olvidado decirle que sabía karate».
Zeven no pudo caminar durante varios días y debido al intenso dolor tuvo que ir al médico, quien le dijo que tenía «estallamiento testicular postraumático». La única solución para su problema fue extirpar uno de sus testículos, y decidió filmarlo.