La increíble noticia la publica el medio ‘Cairns Times‘, aunque otros, como ‘Metro‘, dudan de su veracidad.
Según el primero, un joven de 26 años, ha muerto en Australia tras haber intentado tener sexo con un cocodrilo.
El chalado se encontraba bajo los efectos de una metanfetamina que se fuma, conocida como «ice», y divisó al reptil en las inmediaciones de una playa. Así, ni corto ni perozoso y en pelota picada, se fue a por él con el ánimo de mantener relaciones sexuales.
Así lo confirmaron al parecer varios testigos, quienes indicaron que el animal se defendió.
En cuestión de un segundo, según los presentes, el cocodrilo lo atrapó con sus mandíbulas y se sumergió en el agua. Tanto el reptil como el hombre desaparecieron y de momento no hay rastro de ambos.
Quizá se hayan fugado juntos, apuntan algunos… y a lo mejor por el qué dirán.