Los efectos de la dura crisis humanitaria que viven los venezolanos tras 20 años de gobiernos chavistas ha desembocado en una migración masiva sin precedentes y ha traído consigo dañinas consecuencias de salud para esta pablación que emigra.
Eduardo Chaín, gerente del Hospital Mental Rudesindo Soto ubicado en Cucuta, Colombia. Ha manifestado que «La salud mental de los migrantes está, se podría decir, de capa caída». Además ha dicho que las principales patologías por las que acuden los pacientes son: depresión, trastorno bipolar, psicosis y farmacodependencia. Así lo destaca laopinion.com.co (La historia de los entierros de los migrantes venezolanos que mueren huyendo del régimen de Maduro)
La entidad no escapa al incremento de los migrantes, que «viene aumentando exponencialmente».
«En 2017 atendimos 22 pacientes y este año llegamos a 66», dijo Chaín, y agregó que la condición mental general de los venezolanos «es entendible», al tratarse de «pacientes que migran sin ninguna esperanza, que vienen a buscar trabajo y no lo consiguen, y son víctimas de acoso».
Recordó que esta población está siendo atendida con recursos propios y exclusivamente para la atención integral de urgencias.
«Casi todos terminan en hospitalización indeterminado tiempo», explicó.
Sin embargo, a su salida, al igual que los demás pacientes que acceden a otros servicios de salud, no pueden mantener sus tratamientos. (El Alto Comisionado de la ONU acerca de la situación migratoria de Venezuela: «Es una crisis monumental»)
«Acceder a un programa de rehabilitación para un paciente migrante es mucho más complejo, porque el hospital presta una atención adecuada y se garantiza que el paciente sale estable, pero la gran dificultad es que sale y no tiene recurso ni para el transporte, en su inmensa mayoría no tiene una red familiar de apoyo ni medicamentos para seguir el tratamiento«, expresó.
Lo anterior termina en la ocurrencia cada vez más frecuente de reingresos hospitalarios, razón por la que el gerente conminó al Gobierno Nacional a «hacer un gran acuerdo para que esos pacientes además de la atención de urgencia se les puedan dar medicamentos», pues las urgencias solo incluyen lo intrahospitalario.
Pese a ello, resaltó que la atención aún no ha generado déficit, pues «el hospital mental goza de muy buena salud», con la ejecución de un plan de gestión integral de riesgo firmado con la Superintendencia Nacional de Salud, y el acompañamiento de la Gobernación.(Maduro llega a la ONU y con él su cinismo: «La crisis migratoria es un invento del imperio»)