Joaquín Guzmán Loera no puede presumir de paciencia. El reconocido criminal no sólo sería responsable de traficar miles de toneladas de droga a Estados Unidos durante dos décadas. Su huella también estaría en el asesinato de los hermanos de al menos dos de los grandes capos mexicanos. (La esposa del Chapo Guzmán, embajadora de la «glamorización del narco»)
También habría orquestado un plan para asesinar al zar antidrogas mexicano, José Luis Santiago Vasconcelos, quien falleció en 2008 al caer la avioneta en la que viajaba.
Así lo declaró en la Corte de Nueva York, Jesús «El Rey» Zambada, quien fuera encargado de las operaciones del Cártel de Sinaloa en Ciudad de México y hermano de Ismael «El Mayo» Zambada, actual líder de la organización criminal.
«El Rey», preso en Estados Unidos, es uno de los testigos de la Fiscalía en el juicio que se le sigue en ese país a Guzmán Loera por 11 cargos relacionados con tráfico de drogas y blanqueo de dinero.
Durante sus anteriores dos comparecencias, Zambada hizo explosivas declaraciones relacionadas con los sobornos que habría pagado el Chapo a la Intepol y a distintas policías.
«Zambada podría revelar que pagó 6 millones a EPN en un restaurante«, según Alan Feuer, periodista del diario The New York Times que cubre el juicio.
Sobre los asesinatos, el hermano del Mayo aseguró que participó en distintas reuniones en las que se discutieron los crímenes.
Uno de estos asesinatos fue el de Rodolfo Carrillo, hermano de Amado Carrillo Fuentes «El Señor de los Cielos», y su esposa, en 2014 en un cine de Culiacán, en el estado de Sinaloa, por negarse a darle la mano a el Chapo.
La pareja fue ejecutada presuntamente por órdenes de Guzmán Loera.
El testigo también señaló que el capo habría mandado asesinar a Julio Beltrán Leyva, del cártel que lleva sus apellidos, fundado por cinco hermanos, uno de ellos Héctor Beltrán Leyva «El H» quien falleció el domingo de un infarto. (Muere Héctor Beltrán Leyva, el capo mexicano que metió al Chapo Guzmán en el tráfico de cocaína)
El motivo fue haber enviando un cargamento de droga al Puerto de Acapulco sin su consentimiento.
En el juego de nombres que empezaron a surgir durante el juicio también se mencionó el del Édgar Valdez «La Barbie», miembro de esta organización, quien en 2002 asesinara al hermano de uno de los líderes de Los Zetas.
«La Barbie», encontró apoyo con Beltrán Leyva, cuyo cártel era aliado de Sinaloa, pero que en 2008 se convirtieron en rivales.
En sus anteriores declaraciones, Zambada detalló las operaciones del Cártel de Sinaloa en el aeropuerto de la capital, a donde llegaban aviones comerciales de América del Sur cargados con cocaína.
Aseguró que personalmente pagó USD 250.000 a un capitán de la policía para evitar la captura de Guzmán Loera en 2003, luego de su primera fuga, la que detalló en una comparecencia anterior.