Una enfermera del estado de Illinois en los Estados Unidos ha demostrado una vez más el gran corazón de los profesionales sanitarios. Ella decidió adoptar a uno de los bebés que cuidó en una unidad de cuidados intensivos pediátricos. (El juez condena a un año de cárcel una mujer que abofeteó a una enfermera por ponerle mal una vía)
Angela Farnan, una de las principales enfermeras a cargo del OSF Children’s Hospital de Illinois, se convirtió oficialmente en madre de su hijo Blaze, de 1 año de edad, el 8 de junio. (Ésta es la enfermera que «curaba» con sexo oral a los alumnos de una escuela)
«Realmente siento que ha bendecido nuestras vidas«, dijo Farnan al programa de televisión Good Morning America. «Está lleno de alegría. Su sonrisa ilumina la habitación.»
Blaze nació con un defecto cardíaco congénito llamado síndrome del corazón izquierdo hipoplásico. Tuvo su primera cirugía cuando sólo tenía 3 días de edad. Dos meses después, debió ser sometido a una segunda intervención quirúrgica. Los médicos de Blaze anticipan que el niño necesitará una tercera cirugía y puede requerir un transplante de corazón algún día.
Farnan dijo que ella se hizo cargo de Blaze durante ese periodo y que incluso tenía la tutela a corto plazo, con el permiso de sus padres. Después de su segunda cirugía el 20 de marzo, la madre biológica de Blaze le propuso a Farnan -entre llantos- que adoptara a su hijo.
«Fue un día muy emotivo porque mi esposo y yo nos enamoramos de él y se estaba acercando cada vez más la fecha en que teníamos que devolverlo«, dijo Farnan.
«[La mamá de Blaze] dijo que ella y su esposo estaban discutiendo la posibilidad de que cuidáramos a Blaze en forma permanente», agregó Farnan. «Estaba llorando y dijo: ‘No quiero que nadie sienta que soy una mala madre‘. Yo le dije que ella tomó la mejor decisión como madre y no había duda de que ama a Blaze».
Farnan y su esposo, Rick, son padres orgullosos de Blaze. Ambos concuerdan de que el nene tiene una personalidad alegre e incluso le gusta bailar música country. «Al convertirme en madre por primera vez, no puedo describir el sentimiento«, dijo Farnan. «Fue uno de los mejores días de nuestras vidas».
«Ahora, llego a casa y él está muy emocionado de verme, me levanta. Puedo tener el peor día y todo lo que quiero hacer es llegar a casa y verlo. Simplemente lo hace todo mejor», añadió.