Los hechos ocurrieron en Colombia, entre la plaza de mercado de San Francisco y el supermercado Megaredil de Bucaramanga (Santander).
Allí dos personajes, un colombiano y un venezolano, fueron protagonistas de una dramática riña que terminó con uno de ellos muerto y el otro con heridas leves, según relata el Diario del Cauca.(Oculta por 20 años un brutal asesinato: «Mi esposa e hijo regresaron a Corea del Sur»)
Los hechos ocurrieron sobre el pasado martes: cuentan los testigos que Edward Enrique Molina Quiceno de 26 años, el venezolano de la historia, le habría comprado un celular al colombiano, pero habría tenido problemas para pagarle, tal situación desató la riña en la que empezaron a tirarse todos los objetos que encontraron a su alrededor, entre ellas sillas y mesas (La Guardia Civil detiene a 4 por el asesinato a golpes del concejal de IU: un crimen pasional).
“Edward al parecer no quería seguir con la disputa, por lo que se alejó unos cuantos metros, pero el colombiano, se sentó observándolo fijamente con esa mirada de odio, y al instante se paró, agarro un cuchillo y la reacción del difunto fue hacer lo mismo, lo que no sabía era que el mal genio de su agresor le haría pegarle la puñalada en el pecho” dijo una de las testigos del hecho.(El crimen de Sophie Sergie: violación y asesinato en un campus que pudo resolverse 26 años después por una técnica de ADN)
El venezolano, oriundo de Barquisimeto, como si presintiera que su muerte estaba cerca, camino hasta la carrera 21 con calle 12, cerca de la UIMIST, y antes de llegar, desesperado del dolor, sacó el cuchillo del pecho con sus manos.
La sangre acumulada brotó a su alrededor, y allí en esa esquina se desvaneció. Personas que estaban observando la escena lo levantaron de las manos y los pies con el fin de auxiliarlo y llevarlo inmediatamente a un centro médico, pero ya era muy tarde, nada se podía hacer.(El brutal asesinato de una embarazada desata una ola de violencia contra venezolanos en Ecuador)