Los inmigrantes en Estados Unidos han logrado una pequeña victoria. La gobernadora de Nuevo México, Michelle Lujan Grisham, firmó una nueva ley que simplifica los trámites para la obtención de licencias de conducir y no favorece la discriminación a causa de la situación migratoria del solicitante. ( Borracho y sin carnet, atropella a dos policias del GOES de paisano que cruzaban un paso de cebra)
La ley SB 278, que se aprobó con una amplia mayoría en la Cámara de Representantes en días pasados, simplifica el proceso al eliminar el requisito de huellas dactilares, que de acuerdo a activistas «invadían la privacidad» de los ciudadanos e inmigrantes indocumentados. (¿Sabes cómo renovar el carnet de conducir: cuánto cuesta, plazos y puntos del permiso?)
La nueva norma permite a los titulares renovar las licencias cada cuatro u ocho años, y acaba con los períodos cortos de renovación. Además de garantizar que la licencia sea igual de aceptada que el real ID.
En 2016, la legislatura estatal votó a favor de un sistema de licencias de conducir en base a dos niveles, una licencia o tarjeta de identificación (Real ID) y una Tarjeta de Autorización para Conducir (DAC, en inglés) para inmigrantes indocumentados o ciudadanos que no desean aplicar bajo el programa de Real ID.
The governor signed SB 278 into law this week! This bill removes frivolous barriers that have stood in the way of New Mexicans’ ability to drive and eliminates pointless fingerprinting requirements that encroach on people’s privacy. #NMleg #NMPol pic.twitter.com/dOWF4vkrOO
— ACLU of New Mexico (@ACLUNM) 4 de abril de 2019
Emmanuelle Leal-Sánchez, vocero de la organización Somos Un Pueblo Unido, señaló que existía una gran confusión por la existencia de los dos documentos, pero que el nuevo marco fijado por la norma crea “un sistema más eficiente para todos”, explicó.
“Después de ocho años de luchar por una licencia de conducir justa, por fin nuestro estado tendrá el sistema de licencias que merece, ahora podrán aplicar ya sean los ciudadanos o los inmigrantes que no cuentan con status migratorio”, dijo a Efe.
Leal-Sánchez recordó que la firma se produce tras ocho años de choques políticos, dos demandas contra la agencia de transporte estatal MVD por prácticas ilegales y discriminatorias, y el trabajo de organizaciones de derechos civiles que lucharon para un proceso “no discriminatorio” cuando se tramita una licencia de conducir en Nuevo México.