Meghan Markle -de licencia por maternidad- no estará presente cuando el príncipe Harry y la reina Isabel II reciban al presidente Donald Trump y a la primera dama Melania para un almuerzo de bienvenida en el Palacio de Buckingham el mes que viene.
La reina Isabel II y parte de la familia real recibirán al líder estadounidense y a su esposa para una visita de estado del 3 al 5 de junio. El príncipe Harry, su hermano William y Kate Middleton se unirán al príncipe Carlos y Camila para la ceremonia en Buckingham.(Los mensajes de Meghan Markle a Lady Di que para muchos, excepto para la reina, han pasado inadvertidos)
Trump también tiene programado tomar el té con el futuro rey, el príncipe William y Middleton en su segundo día, y al día siguiente se reunirá en Downing Street con la primera ministra, Theresa May, unos días antes de que abandone el cargo.
Trump viajará con su hija Ivanka y su esposo Jared Kushner, ambos asesores del presidente, junto con sus hermanos Tiffany Trump, Donald Trump Jr y Eric Trump.
La duquesa de Sussex no estará en la ceremonia ya que está de baja por maternidad tras el nacimiento de su primer hijo Archie Harrison Mountbatten-Windsor, a principios de este mes. No obstante, los medios aseguran que su ausencia en el reunión con Trump fue una decisión de la estadounidense, que no simpatiza con el mandatario republicano.
Antes de mudarse a Londres y casarse con el príncipe Harry en mayo de 2018 en el castillo de Windsor, Markle fue un partidaria abierta de Hillary Clinton durante las elecciones de 2016 y alentó a sus seguidores de Instagram a votar por la candidata demócrata.(Fotos: Las imágenes inéditas de la boda de Meghan Markle y el príncipe Harry)
Durante una entrevista de 2016 en The Nightly Show con Larry Wilmore, Markle ofreció su opinión sobre el entonces candidato para el partido republicano y lo llamó «misógino».
La llegada del bebé no pudo haber llegado en un momento más conveniente para la duquesa.
Los tuits de Trump contra Kate Middleton
Si Markle logró escapar a esta cita debido a su reciente maternidad, no es el caso de Kate Middleton y el príncipe Harry. La duquesa de Cambridge no debe a estar muy a gusto con su encuentro con Trump pero como esposa del futuro rey de Inglaterra tiene ciertas obligaciones más que asumidas. Todo esto se debe un episodio del pasado.
En el año 2012, Middleton fue fotografiada en topless en una piscina durante unas vacaciones con su esposo. Las fotos resultaron un escándalo y el medio que las publicó, Closer, fue llevado a juicio y condenado a pagar una millonaria indemnización.
Kate Middleton is great–but she shouldn’t be sunbathing in the nude–only herself to blame.
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) 17 de septiembre de 2012
Who wouldn’t take Kate’s picture and make lots of money if she does the nude sunbathing thing. Come on Kate!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) 17 de septiembre de 2012