Miranda Shaup-Werner, de 41 años, murió en su habitación del resort hotel Luxury Bahia Principe Bouganvile en República Dominicana. Ocurrió cinco días antes de que un trabajador encontrara sin vida a Nathaniel Holmes, 63, y Cynthia Day, 49 en el Bahía Príncipe La Romana. El matrimonio también falleció dentro de su habitación. (Paga unas lujosas vacaciones en Dominicana y casi pierde la vida: «Pensó que me había matado»)
Según la autopsia realizada por las autoridades, la causa de la muerte fue la misma en los tres casos: un edema pulmonar provocado por presencia de fluidos en los pulmones. (Pillan al jefe de cárceles de República Dominicana en la playa con una reclusa)
Los resultados del forense, y el hecho de que los tres decesos se produjeran con cinco días de diferencia, ha alarmado e inquietado a las familias, que ya pusieron los hechos en conocimiento del Departamento de Estado de EEUU.
El 25 de mayo, Miranda Shaup-Werner tomó del minibar de su habitación una bebida alcohólica pequeña y un ginger ale. Una hora más tarde, se sentó para tomarse un selfie. En seguida se levantó.
«Comenzó a gritar, y cayó al suelo. Él -su esposo- empezó a hacer masaje RCP, intentó reanimarla», contó un familiar de la víctima, McDonald, a la cadena estadounidense Fox.
Daniel Werner y Miranda Shaup-Werner viajaron al país caribeño desde Pennsylvania para celebrar su noveno aniversario. Lo que habían planeado como unas vacaciones idílicas se tornó en una pesadilla súbita aquella noche. Segundos antes de llegar al hospital, los médicos declararon muerta a Miranda. Según el portavoz de la familia, la turista estadounidense no se había sufrido ningún problema de salud en los días previos. No se había aquejado de ningún dolor o síntoma.
Ahora, las sospechas de sus seres queridos se centran en la bebida que Miranda ingirió una hora antes de morir. Denuncian que no le realizaron un examen toxicológico, ni se analizó el vaso o la bebida. No descartan que pudiera haber sido envenenada.
Aunque habían denunciado en medios errores en la investigación, la inquietud y alarma se apoderó de los familiares de Miranda cinco días más tarde, cuando supieron que un matrimonio -también estadounidense- había muerto en el mismo hotel en exactas circunstancias.
El día que falleció Miranda, una pareja se había registrado en el resort: Cynthia Day y Nathaniel Holmes. El matrimonio debía partir el 30 de mayo, pero nunca se presentaron en recepción. Un empleado los encontró sin vida en la cama de su habitación.
«No entendemos lo que está pasando aquí. Tenemos muchas preguntas», dijo McDonald, cuñado de Daniel Werner, en una entrevista telefónica con el diario británico Daily Mail.
El Departamento de Estado de EEUU confirmó que las autoridades habían encontrado en el dormitorio de Cynthia Day y Nathaniel Holmes varios botes con pastillas para el corazón, pero no aclararon si los recipientes estaban vacíos. Además, la Policía Nacional de República Dominicana explicó que días antes, él había pedido asistencia médica. Dijeron que cuando el doctor se acercó a su habitación, el turista rechazó el chequeo.
En una entrevista con la cadena estadounidense NBC, la hija de Nathaniel exigió saber la verdad: «Nunca debió haber ocurrido», lamentó frente a las cámaras. Para los seres queridos de Miranda Shaup, el hecho de que las tres muertes tuvieran lugar en el mismo resort, por la misma causa y con sólo cinco días de diferencia resulta sospechoso, y exige que se abra una nueva carpeta de investigación que determine si los decesos están relacionados.
En el caso de Miranda Shaup, la Policía Nacional de República Dominicana defendió que la fallecida sufría problemas cardíacos. Aunque esto fue confirmado por sus seres queridos, la familia puntualizó que padeció la enfermedad hace 15 años, y que desde entonces nunca sufrió ninguna recaída. Para los allegados de Miranda Shaup, se trata de una «excusa» que dieron las autoridades para cerrar una investigación que consideraron bastante «vaga» y superflua.
Comunicado entero de Bahia Principe Hotels & Resorts