Las mujeres iraníes que envíen sus fotos a una activista afincada en Estados Unidos, dentro de una campaña contra el uso obligatorio del hiyab, podrían ser condenadas a hasta 10 años de prisión. «Aquellas que se graben a sí mismas o a otras retirándose el hiyab, y que envíen fotos a esta mujer (…) serán condenadas a entre uno y 10 años de prisión», dijo el presidente del Tribunal Revolucionario de Teherán, Mousa Ghazanfarabadi, según declaraciones publicadas el lunes por la agencia semioficial de noticias Fars.
Masih Alinejad fundó la campaña «Miércoles blancos» para instar a las mujeres en Irán a subir fotos a medios sociales en las que aparecen sin el pañuelo, como una forma de oponerse a la imposición. En Irán es obligatorio que todas las mujeres lleven en público un hiyab, una pieza de tela que cubre el cabello pero no el rostro. Las que incumplen la norma suelen ser condenadas a dos meses de prisión o menos, y multadas con el equivalente a unos 25 dólares.
Bajo el código de vestimenta islámico de Irán, donde el alcohol está prohibido, las mujeres sólo pueden mostrar en público su rostro, sus manos y sus pies, y se supone que deben usar colores discretos. En los últimos tiempos y en coincidencia con cierta apertura del gobierno de Rohani, y en especial en los distritos más cosmopolitas de la capital, esta norma pareció relajarse un poco. Los pañuelos para la cabeza se hicieron más pequeños y transparentes, y la ropa comenzó a usarse más ceñida al cuerpo.
Sin embargo, la prohibición persiste y la llamada «policía moral», agentes del régimen que controlan el cumplimiento de estas normas, aumenta o reduce su influencia de acuerdo la cantidad de protestas contra el gobierno.