El gobierno de Donald Trump sigue denunciando el uso de artimañas por parte de inmigrantes para conseguir el asilo o un trato más leve de parte de las autoridades migratorias en EEUU.
Según el propio director interino de DHS inmigrantes alquilan, compran y hasta secuestran niños para que los inmigrantes solteros, en su mayoría hombres de Centroamérica, puedan salir rápidamente a los Estados Unidos después de cruzar la frontera ilegalmente.
“Hemos tenido indicios … de que podría costar entre unos pocos cientos, o incluso en algunos casos, menos de 100, hasta 1.000 dólares o más“, dijo Kevin McAleenan, secretario interino del Departamento de Seguridad Nacional, durante una audiencia en el Congreso el 18 de julio.
McAleenan habló sobre el caso de un inmigrante de 51 años que había comprado un bebé de 6 meses por 80 dólares en Guatemala para poder ingresar fácilmente a los Estados Unidos. El hombre, ciudadano hondureño, confesó a los agentes fronterizos cuando se enfrentó a una prueba de ADN.
“Hemos visto todo tipo de organizaciones de contrabando que se comunican con clientes potenciales y con aquellos que cruzan la frontera cómo llevar a un niño con ellos para que se les permita quedarse en los Estados Unidos”, dijo McAleenan. “Han estado activos en publicidad, literalmente en Facebook y en la radio en Centroamérica”.
Según reportes oficiales en las últimas ocho semanas, los agentes especiales de HSI han identificado a 5.500 familias fraudulentas, alrededor del 15 por ciento de todos los casos remitidos.
McAleenan dijo que los agentes han descubierto 921 documentos falsos, y 615 personas han sido procesadas por tráfico o contrabando de un niño.
