El caso de OJ Simpson fue uno de los crímenes más horripilantes y notorios del siglo. En junio de 1994, Nicole Brown Simpson y Ron Goldman fueron asesinados y hallados en un charcos de su propia sangre, según los informes, por las manos de OJ Simpson. Aunque nunca fue condenado por sus asesinatos, se cree que Simpson, quien está en libertad condicional, mató a Brown Simpson y Goldman.
Las fuertes imágenes (según el criterio del espectador) sirven como un sombrío recordatorio de los monstruosos asesinatos cometidos por las manos de alguien que aún no ha sido acusado penalmente.
