El Movimiento contra la Intolerancia en asociación con la Plataforma Ayuda a Venezuela llevaron a cabo un foro para pedir a los partidos políticos españoles «apostar a un compromiso moral, activo, con valentía cívica, para construir una cultura de solidaridad, tolerancia y derechos humanos» que permita «levantar un frente social que no deje resquicios al fanatismo y a la violencia».
El foro denominado «Lucha contra el Racismo, la Xenofobia y a favor de la Política Migratoria», contó con la participaron Esteban Ibarra y Manuel Rodríguez, presidentes de las dos organizaciones antes señaladas y que contó con el apoyo de Carla Santiago, senadora Ciudadanos, María Luisa Alonso, diputada española – venezolana de Ciudadanos por La Rioja y Mariu Galán, excandidata de UPyD al Ayuntamiento de Madrid.
En su exposición, Ibarra presentó un dossier de la xenofobia en el país, destacó hechos puntuales que han ocurrido y apostó por la necesidad de «educar y contar con una ley que permita castigar a quienes asuman esa conducta», aprovechando la ocasión para anunciar que en los próximos días, llamara a todos los partidos políticos de España, a un «Pacto contra la Xenofobia y las diferentes formas de Intolerancia asociadas», mientras Rodríguez habló de «la necesidad y la importancia del sistema asociativo para lograr los cambios que se necesitan».
La senadora Carla Santiago precisó la necesidad de «recurrir a la educación», y añadio que «es la humanización, insistir en los valores, porque la familia juega un papel fundamental».
El evento se llevó a cabo en el salón de Conferencias del Centro Cultural Buenavista estuvieron presentes, Fernando Gerbasi, Diplomático venezolano y Chato Guédez, Embajador del gobierno interino de Venezuela en Marruecos.
A través de un comunicado, recogido por Europa Press, Movimiento contra la Intolerancia señala que, para lograr un acuerdo político «efectivo» es «prioritario» tener instrumentos eficaces para defender a la sociedad de este problema. De ahí que abogue por redactar un texto legislativo «contra la Xenofobia, el Racismo y la Intolerancia» que incluya una Estrategia de intervención Integral.
«Esta Ley debe ser el epicentro del Pacto de Estado y sería complementaria con una Ley General para la Igualdad de Trato y una Ley Integral contra los Delitos de Odio que aún no han sido aprobadas y que también tendrá que asumir el Parlamento», apunta la organización.
Con este escenario, según apuntan, se podría abarcar «todos y cada uno de los ámbitos sociales e institucionales» y se aseguraría «una política educativa y de integración, que potencie el Observatorio contra el Racismo y la Xenofobia (OBERAXE) creado por mandato de la Ley de Derechos y Libertades de los Extranjeros». También supondría fortalecer un funcionariado público con experiencia y compromiso y la creación de un Consejo Social independiente conformado por ONG de la sociedad civil.