El activista Julián LeBarón confirmó que durante la tarde de este lunes se disponían a viajar del municipio de Galeana al poblado de Bavispe en el estado de Sonora. Sin embargo, el vehículo que conducía su esposa Rhonita y en el que iban también sus cuatro hijos sufrió un percance, por lo que el otro vehículo regresó a buscar otro automóvil.
Regresaron al lugar y se encontraron con el auto de Rhonita incendiado y con su cadáver y el de sus hijos adentro. Se cree que fueron tiroteados y que una de las balas alcanzó el tanque de combustible, lo que provocó el estallido del vehículo y su posterior incendio. Así murieron Rhonita María LeBarón, dos gemelos de seis meses y dos niños de 8 y 10 años.
Asi se vive en el Gobierno de @lopezobrador_ Mormones Mexicanos, mujeres y niños inocentes emboscados en la Sierra de Chihuahua son acribillados y quemados vivos por los Carteles que mandan en Mexico! @Javier_Corral @revistaproceso @CarlosLoret @CiroGomezL pic.twitter.com/uQNJYbeO73
— LeBaron (@AlexLebaron1) November 4, 2019
Mientras trataban de comprender lo que había sucedido, sus parientes Dawna Langford Ray y Christina Langford, además de 10 menores, entre ellos Titus Alvin Miller, Tiana Gricel Miller, Krystal Bellaine, Howard Jacob Jr., July, Twins Born y María Rhonita Miller, fueron a su vez atacados por pistoleros.
Tanto las dos mujeres, identificados como al menos cinco niños más murieron en el nuevo ataque, mientras que otro cinco habrían huido o fueron secuestrados y su paradero es aún desconocido. No hay identidad confirmada de los menores que perdieron la vida en el brutal ataque.
Lafe Langford Jr., familiar de las víctimas, compartió en redes sociales un video del auto calcinado y señaló lo siguiente: “Somos una comunidad de ciudadanos estadounidenses que viven y trabajan entre México y Estados Unidos, mientras estamos bajo ataque de los cárteles”.
“Hemos estado pidiendo a las embajadas estadounidenses en México todo el día… necesitamos que esto sea compartido y el mundo entero pueda presenciar los terribles actos inhumanos y brutales que se han cometido contra nosotros hoy”, agregó en su mensaje.
Por su parte, la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) informó en su cuenta de Twitter que, a través de la Mesa de Seguridad para la Construcción de la Paz en Sonora, se movilizó a las autoridades para dar seguimiento a las denuncias por la desaparición de estas personas. El fiscal general, César Peniche Espejel, anunció un operativo por parte de la Agencia Estatal de Investigaciones (AEI).
La #SSPC informa a través de la Mesa de Seguridad para la Construcción de la Paz en Sonora que se instruyó el reforzamiento del estado de fuerza en Bavispe con motivo de las denuncias sobre la desaparición y agresión a varias personas que se desplazaban a La Mora. (1/2)
— Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (@SSPCMexico) November 5, 2019
La familia LeBarón es un grupo que tras ser expulsado de Estados Unidos, fue acogido en México. Sus orígenes se remontan a Ervil Morrell LeBaron, quien fue dirigente de un grupo fundamentalista mormón.
Tras su llegada a México, alrededor de 1924, fundaron la colonia Le Barón, localizada en la zona noroeste del estado de Chihuahua. En 2009 esta comunidad volvió a aparecer en la prensa nacional por un caso de homicidio.
El 2 de mayo de 2009, Érick LeBarón fue secuestrado en la comunidad mormona de Chihuahua. Los captores del joven de 16 años exigían un rescate de un millón de dólares, lo que ocasionó que Benjamín, su hermano mayor, se organizara para exigir a las autoridades que fuera rescatado sin pagar por su liberación.
El 9 de mayo Erick fue liberado. Fue hallado en un cerro del municipio de Valle de Zaragoza, sin lesiones. Sin embargo, la madrugada del 7 de julio de 2009, un grupo de 17 sicarios entró a la vivienda de Benjamín, destruyendo su casa y aterrorizando a su familia.
Cuando su cuñado Luis fue a ayudarle, se los llevaron a los dos, los hincaron y les dispararon a quemarropa cuatro veces en la cabeza. Las investigaciones de la autoridad ministerial revelaron que los homicidios de Benjamín y Luis fueron represalias de los secuestradores.