El cuerpo humano es todo un mundo lleno de compejidades y cuando se habla de sexualidad hay que decir que son las mujeres las que pueden sufrir mayores cambios.
Y aunque también le puede ocurrir a los hombres, en el caso de las mujeres las causas suelen ser mucho más diversas.
1. Causas físicas
Existen muchas enfermedades y cambios físicos capaces de disminuir el deseo sexual femenino, tal como apunta Mayo Clinic.
Incluso enfermedades no sexuales pueden acabar el deseo sexual. Diabetes, artritis, cáncer, enfermedades neurológicas y enfermedades arteriales, entre otras, tienen un determinado impacto en la libido femenina y masculina.
Operaciones quirúrgicas aplicadas sobre los genitales o los pechos se vinculan ocasionalmente con afectaciones sobre la imagen corporal y la función y deseos sexuales.
Ciertas prácticas en el estilo de vida acaban con el deseo sexual de la mujer, como el consumo excesivo de alcohol y el uso de drogas ilegales. Fumar es otra actividad que disminuye el deseo sexual al reducir el flujo sanguíneo y consecuentemente la excitación.
2. Cambios hormonales
Los cambios que resultan en la reducción del deseo sexual pueden ocurrir a nivel hormonal, especialmente a partir de los 40 años.
El estrógeno tiende a disminuir a medida que la mujer se acerca a la menopausia. Esto conduce a un menor interés en el sexo y a la sequedad de los tejidos vaginales, lo que ocasionaría relaciones sexuales incómodas o dolorosas.
No obstante, las mujeres que entran en la menopausia aún pueden tener sexo de manera satisfactoria y agradable, pero es bastante común una libido sexual disminuida en esta etapa.
3. Causas psicológicas
El estado de ánimo afecta el deseo sexual, así como las consecuencias de experiencias sexuales anteriores, algunas de las causas psicológicas capaces de alterar la libido femenina son las siguientes:
- Baja autoestima
- Depresión o ansiedad
- Problemas de salud mental
- Estrés
- Experiencias sexuales negativas en el pasado
- Antecedentes de maltrato físico o abuso sexual
Hay diversas causas que acaban el deseo sexual femenino, apuntar a una en específico no es lo correcto si antes no se han realizado estudios que la señalen como una causa concreta. Consulta con un especialista para confirmar o negar las posibles razones.