Un brutal crimen se ha vivido en las calles de Nueva York. Un niño de trece años fue arrestado en relación con el asesinato de una estudiante universitaria que caminaba en un parque de Manhattan, mientras la Policía continúa la búsqueda de otros dos sospechosos.
De acuerdo con medios de prensa locales, tras ser detenido el menor se habría implicado en el ataque a Tessa Majors, de 18 años, mientras caminaba por el parque Morningside, cerca del Barnard College donde estudiaba y también la Universidad de Columbia.
El niño estaba en el vestíbulo de un edificio cerca del parque y usaba ropa que coincidía con la descripción de un sospechoso y fue arrestado por entrar sin autorización a una propiedad. Al registrarlo los agentes encontraron que llevaba un cuchillo.
El niño, que vive en el Harlem, fue acusado de asesinato, robo y posesión criminal de un arma, de acuerdo con fuentes del New York Times. Indica además que las autoridades creen que el menor era parte del grupo que atacó a la estudiante en el parque de Manhattan y que otras dos personas participaron en el apuñalamiento de Majors, que era de Virginia.
El asesinato de la joven, que estaba interesada en el periodismo y tocaba en una banda de rock, estremeció a la comunidad estudiantil. El jefe de detectives de la Policía de Nueva York, Rodney Harrison, ha dicho que Majors caminaba por el parque cuando un grupo se le acercó.
También que hubo una lucha y que uno de los atacantes la apuñaló varias veces, tras lo cual huyeron. De acuerdo con el detective, Majors logró subir un tramo de las escaleras y salir a la calle donde un guardia de seguridad de la universidad la encontró y fue llevada a un hospital del área donde murió debido a las heridas.
La joven se había mudado recientemente a Nueva York para asistir a la universidad y los fines de semana cantaba con la banda de rock Patient 0, que este otoño había lanzado su primer disco y ofrecido su primer concierto en Nueva York el pasado octubre.
“Perdimos a una joven muy especial, muy talentosa y muy querida”, declaró su familia, que recordó que “Tess brilló en este mundo y nuestros corazones nunca serán los mismos”.