Los hackers han vuelto a atacar la intimidad de una de las estrellas más reconocidas de Hollywood. En esta oportunidad, la víctima ha sido una de las protagonistas de la saga de Harry Potter, cuya magia no le permitió guardar en la ‘Cámara Secreta’ las imágenes más privadas de su vida.
En 2014 sucedió con Jennifer Lawrence y desde entonces no ha parado. Bonnie Wright, conocida por dar vida a Ginny Weasley en la saga cinematográfica de Harry Potter ha vuelto a ser víctima del «porno-hackeo masivo», pues ya el mes pasado fueron reveladas un pack de fotos de ella totalmente desnuda. La actriz británica de 28 años se ha convertido una vez más en noticia mundial por haberse filtrado fotografías comprometedoras de ella frente al espejo.
Las imágenes pertenecerían a su galería privada de fotografías y aún se desconocen como llegaron estas fotografías a manos de los hackers. Hasta el momento, la esposa de Harry Potter no se ha pronunciando ante este polémico hecho.