Si el Programa de Ana Rosa no hubiese contado con la presencia de Eduardo Inda este 30 de diciembre, quizás se hubiese impuesto la tesis de que la encargada de Negocios del Gobierno español en Bolivia fue con cuatro policías encapuchados a la Embajada de México a buscar sal… o azúcar.
Elena Valenciano dio muestras de la disciplina partidista del PSOE y se puso de perfil para afirmar que lo que había sucedido era «un conflicto entre Bolivia y México», con toda la intención de quitarle peso a la grave intervención de funcionarios españoles en la Embajada de México, y haciéndose la total desentendida afirmó que los diplomáticos españoles, «Habrán ido a lo que hayan ido, que no lo sé, pero lo que estoy segura es que no han ido a rescatar a los políticos bolivianos, en un coche no van a sacar a nueve tíos, eso seguro no, habrán ido a otra cosa, a lo mejor algo inconfesable, pero a eso no».
Por ello, Eduardo Inda le hizo una descripción real del asunto:
«Lo que querían era sacar a dos personajes claves, Hector Arce, que es el que hizo todos los pagos al entorno de Podemos y al señor Quintana, que es el número dos del gobierno de Morales, que es un señor que es, entre otras cosas, narcotraficante y luego otra cuestión, los GEO van allí hace unos días, se les hacen pasaportes nuevos expedidos el día 20 de diciembre, que casualidad y de repente se vuelven justo después del incidente de que les pillan».
A partir de allí, vuelve la incredulidad de la exeurodiputada, Valenciano regresó con una insólita interrogante, «¿Para qué los querían sacarlos de allí, para matarlos?»
Y vuelve Inda, que afirma que los podrían querer extraer de la Embajada «para llevarlos a Argentina. por ejemplo, donde se ha asilado el señor Morales», y añade «lo que es evidente es que si están asilados en Argentina las posibilidades de que los enganche la Justicia boliviana son iguales cero, si están en Bolivia y pisan lo que no es territorio de la embajada de México son detenidos inmediatamente».
Pero no podría faltar el nombre de uno de los tertulianos ausentes, se trata de Juan Carlos Monedero, el fundador de Podemos que ha sido señalado por sus vínculos con las empresa Neurona, compañía investigada en el país suramericano por haber cobrado 1.5 millones de dólares por adjudicaciones a dedo del Gobierno de Morales.
«Estos señores están perseguidos por terrorismo, por sedición, a uno de ellos se le acusa de narcotráfico y además de todo eso, Hector Arce que era un miembro muy relevante del equipo de Evo Morales, era la persona que financiaba al entorno de Podemos, entre otros a vuestro contertulio Juan Carlos Monedero», concluyó Inda.