El gobierno interino de Pedro Sánchez podría estar intentando intervenir en el aumento del conflicto diplomático entre Bolivia y México. Así lo denunció el Gobierno de Bolivia este 27 de diciembre, cuando afirmó que funcionarios de la embajada de España en La Paz intentaron ingresar de manera clandestina y acompañados por personas encapuchadas a la custodiada residencia diplomática de México.
El episodio se generó en medio de un conflicto entre Bolivia y México por la decisión del país azteca de otorgar asilo a aliados del expresidente Evo Morales, que renunció ante las presiones de las fuerzas armadas tras una fraudulenta elección presidencial. Es importante destacar que la decisión de Andrés Manuel López Obrador permitió al expresidente de Bolivia coordinar las manifestaciones y bloqueos violentos a las principales ciudades del país andino. También le sirvió de plataforma para escapar hasta Argentina, donde el peronista Alberto Fernández ya ha reconocido que no entregará a Evo Morales a la justicia boliviana, pese a tener una orden de captura por delitos como sedición y corrupción.
El gobierno mexicano ha denunciando desde hace varios días un incremento “exagerado” de la vigilancia policial alrededor de su embajada en La Paz, luego de que el presidente Andrés Manuel López Obrador otorgó en noviembre asilo político a Morales.
La canciller boliviana, Karen Longaric, que forma parte del Gobierno interino liderado por Jeanine Añez tras la dimisión de Morales, dijo en conferencia de prensa que enviará al Gobierno de España una nota para denunciar “estos atropellos” y que reclamará el cumplimiento “riguroso de la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas”.
López Obrador dijo el viernes que el derecho de otorgar asilo debe ser respetado, un día después de que México anunció que acudirá a la Corte Internacional de Justicia (CIJ) para que Bolivia cese el “asedio” que lleva a cabo desde hace días a su sede diplomática.
Un español para defender al fraudulento
Evo Morales está intentando ejecutar por los tribunales el fraude electoral que no conquistó en las urnas. El fraudulento expresidente de Bolivia, que está escondido en Argentina pese a la orden de captura de la justicia de su país, ha contratado un costoso equipo legal que buscará devolverle al poder tras haber manipulado el conteo de votos para quedarse en la presidencia.
Una de las ‘estrellas’ del equipo legal de Evo Morales es el exjuez Baltasar Garzón, quien irónicamente es un referente internacional en la lucha por la defensa de los Derechos Humanos. El español ya ha comenzado su defensa a favor del fraudulento expresidente y lo hizo con la adopción del discurso del ‘socialismo del siglo XXI’. Es decir, tildando el fallido fraude electoral de un “golpe de Estado”.
Baltasar Garzón no ha perdido tiempo y, así como hicieron los partidos de la extrema izquierda y regímenes comunistas, ha atacado a la Organización de los Estados Americanos (OEA). En concreto, el exjuez español afirmó que “estamos ante una situación de facto que no tiene cobertura legal ni constitucional, más allá de la que los órganos le están dando bajo la tutela militar, no es legítima”.