Las autoridades británicas han subrayado que deben cumplir con la obligación de extraditar a Assange a Suecia para que responda por los supuestos delitos sexuales que se le imputan en ese país
El ministro de Asuntos Exteriores, Ricardo Patiño, ha confirmado que Ecuador ha concedido «asilo diplomático» este jueves 16 agosto 2012 al fundador de Wikileaks, Julian Assange, que lleva ocho semanas refugiado en la embajada de este país en Londres.
El Ministerio de Relaciones Exteriores del Reino Unido indicó a The Guardian que, a pesar de la decisión de Ecuador, seguirán adelante con la extradición de Assange a Suecia.
«Estamos decepcionados por la declaración del ministro de Relaciones Exteriores de Ecuador, que ofreció asilo político a Julian Assange.
Bajo nuestras leyes, una vez agotadas todas las opción de apelación del señor Assange, las autoridades británicas tienen la obligación vinculante de extraditarlo a Suecia (…) La decisión del gobierno ecuatoriano no cambia eso».
El funcionario británico espera que se pueda llegar a una solución a través de la negociación.
Asilo diplomático
En una rueda de prensa en la sede de la Cancillería de Ecuador, Ricardo Patiño informó de que la decisión se sustenta en el derecho internacional y porque considera que la vida del australiano corre peligro si es finalmente extraditado a Estados Unidos.
«Ecuador ha tenido en cuenta el peligro de que sea extraditado a un país fuera de la Unión Europea sin garantías y ante la posibilidad de que Julian Assange sea llevado a Estados Unidos donde no tendría un juicio justo y podría ser juzgado por tribunales especiales y sufrir un trato cruel o degradante, e incluso se le podría aplicar la pena capital».
Mientras Londres se ha mostrado decepcionado, Assange no ha tardado en agradecer la decisión del Gobierno ecuatoriano en su cuenta de Twitter:
«Gracias Ecuador y a ustedes»
Assange, además, ha valorado como «una victoria importante» la decisión de Quito, «para mí y para mis allegados», ha dicho a personal de la embajada citado por AFP. Y ha añadido: «Las cosas probablemente van a ponerse más estresantes ahora».
El canciller ecuatoriano ha pedido a los organismos de integración de la región que se convoquen reuniones urgentes para analizar el caso y que pueda haber una respuesta a ese nivel. Mencionó la posibilidad de una reunión de ministros de Exteriores de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) y de la Alternativa Bolivariana para los Pueblos de América (ALBA) para este sábado en Ecuador.
Avanzó que el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), José Miguel Insulza, podría convocar una asamblea extraordinaria del organismo los próximos días.
Persecución política
El ministro declaró que la concesión del asilo a Assange obedece también al temor que ha expresado sobre «la eventual persecución política que podría sufrir en un tercer Estado», en referencia a EEUU, tras ser extraditado por el Reino Unido a Suecia, donde es acusado de delitos sexuales.
Los abogados del fundador de WikiLeaks temen que en EEUU su cliente pueda ser condenado a cadena perpetua o a pena de muerte por la «desclasificación de información comprometedora» de cables diplomáticos de Washington por esa web.
Patiño dijo que Assange argumentó en su petición de asilo que «es víctima de una persecución en distintos países, la cual se deriva no solo de sus ideas y sus acciones sino de su trabajo al publicar información que compromete a los poderosos, de publicar la verdad y, con ello, desenmascarar la corrupción y graves abusos a los derechos humanos de ciudadanos alrededor del mundo».
Añadió que, según la «evidencia jurídica» recogida por el Gobierno ecuatoriano, tiene fundamento que si Assange es extraditado a EEUU «no tendría un juicio justo, podría ser juzgado por tribunales especiales o militares» y ser sometido a tratos crueles o degradantes.
Asimismo, dijo que Ecuador cree que «se han menoscabado los derechos procesales» de Assange y que tampoco cuenta con la ayuda de su país de origen, Australia.
Temores de Assange
«El Gobierno del Ecuador considera que estos argumentos dan sustento a los temores de Julian Assange, en tanto este puede ser víctima de una persecución política como consecuencia de su defensa decidida a favor de la libertad de expresión y de la libertad de prensa», insistió Patiño.
El canciller volvió a rechazar la «amenaza explícita» expresada el miércoles por las autoridades británicas, en el sentido de que podría irrumpir en la sede de la embajada de Ecuador en Londres para detener a Assange, quien violó la libertad condicional al refugiarse en esa legación el 19 de junio pasado para evitar su extradición a Suecia.
Las autoridades británicas han subrayado que deben cumplir con la obligación de extraditar a Assange a Suecia para que responda por los supuestos delitos sexuales que se le imputan en ese país.
Para Patiño, «la falta de convención internacional o de legislación interna de los Estados no puede alegarse legítimamente para limitar, menoscabar o denegar el derecho al asilo».
El Gobierno de Ecuador «tiene la certeza de que el Gobierno británico sabrá valorar la justicia y rectitud de la posición ecuatoriana».
Por eso, dijo Patiño, Ecuador «confía en que el Reino Unido ofrecerá lo antes posible las garantías o el salvoconducto necesarios y pertinentes a la situación del asilado».
Quito también confía en mantener inalterados los «excelentes lazos de amistad y respeto mutuo que unen al Ecuador y al Reino Unido y a sus respectivos pueblos, empeñados como están en la promoción y defensa de los mismos principios y valores», dijo el ministro de Exteriores.
Suecia no se pronuncia
La Fiscalía sueca ha evitado pronunciarse sobre la eventual concesión de asilo de Ecuador al fundador de WikiLeaks, al que la Justicia del Reino Unido ha decidido extraditar a Suecia donde se le acusa de delitos sexuales.
La directora de la Fiscalía, Marianne Ny, aseguró en un escueto comunicado que «no comentará el asunto en tanto en cuanto siga siendo gestionado por las autoridades británicas», ya que Assange se encuentra en Londres.
La nota argumenta asimismo que «el hecho de que Ecuador le haya garantizado el asilo a Julian Assange no afecta a la investigación criminal sueca», que sigue abierta.
En declaraciones previas a Efe, una portavoz de la Fiscalía sueca declaró cuando aún no se había hecho oficial la concesión de asilo por Quito, que no iban a hacer ningún comentario al respecto.
«Tampoco después de la decisión de Ecuador. Sólo nos pronunciaremos en el caso de que Assange sea definitivamente extraditado a Suecia».