Crece la expectación en Londres: 'streaming' a las puertas de la embajada
La tensión diplomática entre los Gobiernos de Ecuador y Reino Unido crece por momentos como consecuencia de la situación legal de Julian Assange, fundador de Wikileaks, que permanece desde el pasado 19 de junio de 2012 refugiado en la embajada ecuatoriana en Londres.
El Ejecutivo de Rafael Correa ha denunciado en las últimas horas que ha recibido un informe británico con una amenaza de acciones para arrestar a Assange, que ha pedido asilo al país andino para no ser extraditado a Suecia, que le reclama por una acusación relacionada con delitos sexuales.
Así lo señaló este 15 de agosto de 2012 el canciller ecuatoriano, Ricardo Patiño, en una rueda de prensa en la que ratificó que si ello ocurre su país tomará acciones contundentes.
La comunicación oficial británica, dada a conocer este miércoles a la embajadora de Ecuador en Londres, Ana Albán, advierte de la posibilidad de que las autoridades británicas «podrían asaltar» la sede diplomática en Londres, «si no se entrega a Julian Assange», señaló Patiño
El canciller ecuatoriano calificó la posición británica como un «acto hostil e inamistoso» que viola «expresas normas internacionales».
La Asamblea Nacional de Ecuador analizará este jueves en una sesión extraordinaria la comunicación del Reino Unido; así lo ha explicado tras recordar que la Constitución establece que Ecuador es un «Estado constitucional de derechos y justicia, social, democrático, soberano, independiente, unitario, intercultural, plurinacional y laico. Se organiza en forma de república y se gobierna de manera descentralizada».
Asimismo, ha añadido que en concordancia con lo anterior, y respecto de las relaciones internacionales, condena «la injerencia de los Estados en los asuntos internos de otros Estados y cualquier forma de intervención, sea incursión armada, agresión, ocupación o bloqueo económico o militar».
Este jueves responderán a Assange
Por su parte, Ricardo Patiño reveló que el Gobierno ecuatoriano anunciará también este jueves su respuesta a la petición de asilo formulada por Assange, quien teme ser extraditado a Suecia y de ahí a Estados Unidos, donde podría enfrentarse a la pena de muerte por haber filtrado cables diplomáticos que han avergonzado a ese gobierno y a otros, según temen los abogados del exhacker británico.
Suecia requiere a Assange en un caso de denuncias de supuestos delitos sexuales, que él niega y que sospecha es un paso para su extradición a EEUU.
Según Patiño, las autoridades británicas han justificado sus pretensiones en una ley sobre instalaciones diplomáticas de 1987, pero añadió que ese tipo de argumentos son inadmisibles, tanto en el ámbito jurídico como en el político.
Además, indicó que, de acuerdo a la normativa internacional, las sedes diplomáticas «son inviolables» y que ninguna autoridad de un Estado receptor puede «irrumpir» en ellas.
«El ingreso no autorizado de cualquier autoridad británica al recinto de la embajada del Ecuador sería una violación flagrante» y, según dijo, iría en contra de la Convención de Viena y la Carta de las Naciones Unidas.
«Esa norma prohíbe a los Estados el uso de la fuerza y la amenaza del uso de la fuerza, como ha sido en este caso».
Patiño recordó que las sedes diplomáticas gozan de «inmunidades» y que no es «lícito penetrar» en ellas para «arrestar a un asilado político».
Dijo que si se concretan las amenazas, estas «serán interpretadas por Ecuador como un acto inamistoso, hostil e intolerable», además como «un atentado a nuestra soberanía que nos obligaría a responder con la mayor contundencia diplomática».
«Nosotros no somos una colonia británica», apostilló el canciller tras afirmar que «los tiempos de la colonia terminaron».
Londres habla de «obligación» legal
Reino Unido indica, por otro lado, que tiene la «obligación legal» de extraditar a Suecia a Julian Assange, fundador de WikiLeaks, como ha decidido el Tribunal Supremo británico, máxima instancia judicial del país.
«Hemos dejado claro en nuestras conversaciones con el Gobierno ecuatoriano que el Reino Unido tiene la obligación legal de extraditar a Assange a Suecia para que haga frente a las alegaciones de delitos sexuales», dijo esta noche una portavoz del Ministerio británico de Exteriores.
«Estamos decididos a cumplir esta obligación».
El 20 de junio, Scotland Yard avisó de que el fundador de WikiLeaks será detenido si abandona la Embajada de Ecuador en Londres ya que violó las condiciones de su arresto domiciliario.
Protestas ante la embajada
Un grupo de ciudadanos se congregó a última hora del miércoles en las afueras de la Embajada del Reino Unido en Quito. Los manifestantes, unos 40, se apostaron en una plaza frente al edificio donde se encuentra la sede diplomática, ubicada en una exclusiva zona del centro comercial de la ciudad.
«Esto no es monarquía, ejercemos soberanía» y «Somos soberanos, no una colonia», fueron algunos de los gritos de los activistas, la mayoría jóvenes.
Uno de los manifestantes incluso pretendió tomar la bandera británica de un hasta ubicada en la plazoleta, pero policías impidieron que lo hiciera.
Los agentes usaron gas pimienta para retirar a los activistas de la plaza hasta una avenida, donde continuaron con su protesta.Entre los manifestantes se encontraba el asambleísta Paco Velasco, del oficialista Movimiento Alianza País, quien dijo que se replicarán otras protestas en los próximos días, aunque no dio más detalles.
Para Velasco, la «amenaza«, anunciada por el canciller ecuatoriano, Ricardo Patiño, supone la intención del Gobierno británico de «romper los principios» del derecho internacional y de la constitución de Ecuador.
«Rechazamos esta barbaridad del Gobierno inglés», porque «cualquier orden judicial no puede ir contra principios fundamentales del respeto al territorio de otro país, a territorio soberano».
En nombre de una euroorden no se pueden «romper los principios», apuntó Velasco, y dijo estar seguro de que Ecuador concederá asilo al fundador de WikiLeaks.
«El señor Assange no ha fabricado armas de destrucción masiva, no es un criminal en potencia, no es un peligro para la humanidad y por ello no hay razón par la amenaza».
Para Velasco, a Assange lo persiguen las potencias por haber filtrado «informaciones de cómo actúa la diplomacia internacional, la diplomacia estadounidense».
«Ecuador entero se va a movilizar porque no se puede permitir esta amenaza».
El legislador iniste en que se producirán nuevas manifestaciones para rechazar la actitud británica.