El ministro de Asuntos Exteriores, UE y Cooperación en funciones, Josep Borrell, prevé dejar el Gobierno en el Consejo de Ministros del próximo 28 de junio, cuatro días antes de que se constituya el Parlamento Europeo del que él formará parte, según varias fuentes consultadas por Europa Press. Antes de comenzar su nueva etapa, es importante recordar algunas de sus mejores ‘caricias’ al régimen de Nicolás Maduro.
Una de las últimas ‘joyas’ que ha dejado el representante socialista, ha sido la comparación realizada sobre Estados Unidos para explicar el papel que está jugando en la crisis política de Venezuela: “Están actuando como el cowboy del oeste, diciendo ‘miren que desenfundo’», cuando a su entender la situación «no está para que nadie desenfunde» sino para encontrar «una solución pacífica, negociada y democrática». Una línea que tanto tiempo viene defendiendo e intentando implementar el expresidente José Luis Rodríguez Zapatero.
La liberación de Leopoldo López tampoco ha sido un tema cómodo para Borrell. A pesar de que ha aceptado la presencia del expreso político en la residencia del embajador español en Caracas, también ha mantenido algunos gestos amistosos con el régimen chavista. Por ejemplo, ha puesto un ‘bozal’ a López al prohibirle que realice declaraciones a los medios de comunicación, al mismo tiempo que ha respetado el cerco a la residencia del embajador por parte de los esbirros del régimen.
Justamente sobre ese punto, la diputada Cayetana Álvarez de Toledo publicó un tweet donde denuncia que «matones armados de Nicolás Maduro acosan toda la noche a Leopoldo López y a su familia en la Embajada de España en Venezuela», al mismo tiempo que critica con fuerza las declaraciones del Ministro de Asuntos Exteriores en Funciones.
Álvarez de Toledo afirmó que «Borrell asume la versión del dictador Nicolás Maduro». En concreto, considera desacertado que el Ministro de Asuntos Exteriores en Funciones tilde la situación de «normal» o que afirme que Leopoldo López «escapó del arresto domiciliario». El representante socialista parece olvidar que se trata del famoso caso de un preso político, donde no se han cumplido con los requisitos de transparencia y objetividad en el juicio que le llevó a la prisión.
Intervención militar
A pesar de que la dictadura de Nicolás Maduro ha pasado con los tanques por encima de sus ciudadanos, fue el ministro español de Asuntos Exteriores, Josep Borrell, quien expresó ante el Consejo de Derechos Humanos de la ONU su preocupación por la situación de Venezuela y subrayó que el Gobierno de España está trabajando “para evitar una intervención militar extranjera”.
En el mismo sentido, el exembajador venezolano ante la ONU, Diego Arria, también ha mostrado su descontento con Borrell por su tranquilidad ante la situación de Venezuela, así como por no haberle concedido una entrevista a pesar de que la solicitó tanto por privado como por público.
La comunidad venezolana sigue con atención los cambios en el Gobierno de España, ya que consideran un riesgo quién podrá ser el próximo ministro de Asuntos Exteriores y si seguirá o no la ‘doctrina Zapatero’ en la crisis política, económica y social que atraviesa la nación caribeña.