España está resguardando a importantes figuras del chavismo y que no están afrontando ante la Justicia por los crímenes realizados en Venezuela. Un tribunal español anunció que denegó extraditar a Estados Unidos a Javier Ochoa Alvarado, que presuntamente integró una red de ex altos funcionarios que obtuvieron millonarios sobornos de proveedores de la estatal petrolera venezolana PDVSA, para que sea juzgado en España.
El ex presidente de una filial de PDVSA, Bariven, era solicitado por un tribunal de Texas, al sur de Estados Unidos, por pertenencia a organización criminal y blanqueo de capitales, en el marco de una amplia investigación que ya llevó a la cárcel en Estados Unidos a otros ex funcionarios relacionados con la petrolera estatal venezolana.
Sin embargo, “los hechos por los que Estados Unidos reclama la entrega de Ochoa Alvarado también están siendo investigados en España”, indicó la Audiencia Nacional, una alta jurisdicción en Madrid a cargo de las extradiciones, en una nota de prensa. Además, el acusado -hispano-venezolano- posee la nacionalidad española desde 2017, destacó la Audiencia Nacional, desestimando el alegato de la fiscalía de que Ochoa Alvarado la habría obtenido de manera fraudulenta para evadir a la justicia norteamericana.
Por todos estos motivos, “procede rechazar la entrega dando preferencia a la jurisdicción española para la investigación de los hechos”, señaló la corte. Según la Audiencia Nacional, los sobornos a Ochoa Alvarado, presidente de Bariven entre 2011 y 2013, y sus cómplices “superarían los 50 millones de dólares, que posteriormente el grupo se dedicó a blanquear a través de sociedades y cuentas bancarias de Estados Unidos y del extranjero”.
En los últimos años, varios ex funcionarios venezolanos han sido extraditados o han sido solicitados por Estados Unidos, principalmente por casos de corrupción, pero también por narcotráfico, como el caso de Hugo Carvajal, el ex jefe de inteligencia militar del fallecido presidente venezolano Hugo Chávez. Carvajal se mantiene en paradero desconocido desde que la policía intentó detenerlo en noviembre luego de que la Audiencia Nacional decidiera a favor de su extradición hacia Estados Unidos.
La Policía española sigue buscando al ex general venezolano para detenerlo. Una de las hipótesis que maneja la fuerza es que contaba con información por adelantado sobre la decisión de extraditarlo a los Estados Unidos. Además, se cree que huyó de España con pasaporte falso dado que su documentación original está en poder de la Justicia española.