Un hombre de Virginia cobraba miles de dólares a inmigrantes indocumentados a cambio de licencias de conducir reales aunque procesadas de manera fraudulenta.
Warner Antonio Portillo, de 34 años, se declaró culpable de producir y transferir documentos de identidad de manera fraudulenta. La mayoría de los casos eran licencias de conducir en Maryland (EEUU).
Portillo trabajaba en conjunto con dos empleados de la Administración de Motores y Vehículos de Maryland. El sujeto cobraba entre 800 y 5.000 dólares por cada licencia.
El acusado se encargaba de conseguir los documentos requeridos por el estado de Maryland para otorgar las licencias como pagos de impuestos, prueba de residencia y documentos de identidad. Los inmigrantes eran enviados a la oficina de Largo en donde eran llevados a las cabinas de los dos cómplices de Portillo.
El fraude ocurrió entre julio de 2015 y marzo de 2016. Los trabajadores de Motores y Vehículos recibían una tajada entre los 500 y 1.000 dólares por caso. Los sujetos entregaron al menos 276 licencias de conducir.
Portillo enfrenta unos 15 años de prisión y deberá pagar 276.000 dólares. Se desconoce la sanción para los cómplices. La sentencia será el 19 de diciembre de 2019.
